La vuelta de Rubi al Almería ya es una realidad: firma por tres temporadas

Almería/Apenas ha pasado ya un año desde aquel 4 de junio de 2023 en el que la UD Almería conseguía su última permanencia en Primera División después de empatar a tres en su visita al ya descendido Espanyol. Ese mismo día en la sala de prensa del RCDE Stadium Rubi anunciaba su no continuidad al frente del conjunto rojiblanco tras cumplir el objetivo de la salvación. Ahora, prácticamente 365 días más tarde el técnico de Vilasar de Mar regresa a territorio indálico para afrontar su segunda etapa al frente de los unionistas.

Fue justo el día que los rojiblancos disputaron su último encuentro en la máxima categoría, que acabó con goleada frente al Cádiz en el Power Horse Stadium, cuando saltó por primera vez de manera pública el nombre de Joan Francesc Ferrer Sicilia como candidato al banquillo del conjunto almeriense. Lo que por aquel entonces podía parecer tan solo un rumor más de los cientos que aparecen durante cada mercado de fichajes ha acabado convirtiéndose en una realidad. El técnico catalán, quien durante la jornada de este lunes comiendo con Joao Gonçalves, asesor deportivo del club rojiblanco, y su segundo entrenador, Jaume Torra, en un reservado en Tony García Espacio Gastronómico, firma por las próximas tres temporadas y con 10 millones de cláusula de rescisión.

De esta manera, Rubi afrontará su segunda etapa al frente del equipo almeriense después de que el 28 de abril de 2021 se convirtiera por primera vez en entrenador de la UD Almería. Ahora, algo más de tres años de aquella fecha el de Vilasar de Mar regresa al conjunto rojiblanco y lo hace con el claro objetivo de devolverlo a la élite del fútbol español. Después del descenso a Segunda División de esta pasada temporada, firmando los rojiblancos el peor curso de su historia con tan solo veintiún puntos en su casillero, los unionistas afrontan la próxima campaña con la obligación de volver a Primera División.

Rubi busca su tercer ascenso

Un complicado reto del que ya es conocedor, buscando este próximo curso el que sería el tercer ascenso de su carrera después de que antes con el Huesca y, precisamente, con la UD Almería. Así, el técnico catalán tiene ante sí la misión de convertirse en el primer entrenador en la historia del conjunto rojiblanco que consigue subirlo a la máxima categoría. Algo con lo que su figura podría comenzar a adquirir el calificativo de leyenda de acabar haciéndolo.

Asimismo, el preparador catalán es hasta la fecha junto a Unai Emery, ahora técnico del Aston Villa, el único entrenador que ha sido capaz de ascender a los rojiblancos y mantenerlos a la temporada siguiente. Algo que logró hace no tanto, puesto que fue precisamente en la campaña 2022-23 cuando lo consiguió en la última en la que estuvo al frente de la UD Almería, manteniendo al equipo después de subirlo a Primera División durante el curso anterior.

Además, Rubi pasa a convertirse en el primer técnico que vivirá una segunda etapa en el conjunto rojiblanco desde que diera comienzo la era de Turki Alalshikh al frente de la entidad almeriense allá por agosto de 2019. Un regreso que llega después de que por el banquillo rojiblanco pasaran tres entrenadores como fueron Vicente Moreno, Gaizka Garitano y Pepe Mel, con el que se afrontaron los últimos diez encuentros del curso, sumándose también la interinidad de Alberto Lasarte.

El técnico natural de Vilasar de Mar llegó al conjunto rojiblanco en la temporada 2020-21 para dirigirlo durante las seis últimas fechas del campeonato en la categoría de plata, así como en el play off de ascenso, tras la destitución del luso José Gomes. Aquel curso el catalán no pudo devolver a la élite del fútbol español a los rojiblancos, si bien tan solo un año después sí acabaría haciéndolo después de sumar un punto en Butarque y gracias también a un gol de Gio Zarfino en el encuentro que disputaba el Eibar, otro de sus rivales en la lucha por el ascenso, en Alcorcón.

Un empate con el que los almerienses lograban por subir por primera vez desde el cambio de propiedad. Mientras, la siguiente campaña en la última jornada los unionistas sellarían su salvación en la máxima categoría, de nuevo con mucho sufrimiento y no decidiéndose hasta los últimos instantes, después de empatar a tres en su visita al Espanyol, que estaba ya descendido, en el entonces llamado RCDE Stadium. Es ahora cuando el catalán vivirá la que será su segunda etapa en Almería.