Rubi: "A lo mejor se me echará tirando buenos tomates de esta tierra, pero mi idea es estar lo máximo posible"

Almería/Joan Francesc Ferrer Sicilia, 'Rubi', ha entrado por derecho propio en el olimpo de los dioses rojiblancos al convertirse en el entrenador con mayor número de partidos dirigidos, superando tras el duelo saldado con derrota en Burgos la cifra establecida en los albores de la década de 2000 por otro exrojiblanco ilustre, Juan Martínez Casuco. Son 128 encuentros repartidos en dos etapas al frente de la nave rojiblanca que el arquitecto de Vilassar de Mar ha celebrado visitando un lugar simbólico de la capital como es el Cerro de San Cristóbal, donde rememoraba, con la ciudad a sus pies y el Estadio de los Juegos Mediterráneos en el horizonte, cómo le dio el primer sí al club.

"Recuerdo que vinimos el 28 de abril de 2021 y el 28 se vuelve a dar con los 128 partidos. Además si le preguntas a mi hermana desde pequeños mi número preferido es el 28. Del club conocía pocas cosas, sabía que había inversión extranjera y estaba intentando crecer para acercarse a Primera tarde o temprano. También de mis enfrentamientos con el Huesca y el Girona. Fue una decisión difícil porque a pesar de que se nos presentó muy bien el proyecto teníamos la duda de venir para un mes y no subir a Primera. Pero al bajar del coche ya tuve el convencimiento total de haber acertado. Hice llamadas a casa para trasladarle esa ilusión de ir convencidos a nuestro entorno", relataba en una entrevista concedida a los medios del club.

Entre las sorpresas preparadas para festejar la efemérides Rubi contó con un reconocimiento de su antecesor en el récord que acaba de batir, el murciano Juan Casuco: "Después de muchos años me toca pasar el testigo como técnico con más partidos al frente de la UDA. Los récords están para mejorarlos y te doy la enhorabuena porque estás haciendo una buena labor. Espero que se consigan objetivos mejores como es llegar a Primera. Un abrazo fuerte para ti y para la afición, ojalá pronto nos veamos celebrando esos éxitos que la UDA se merece".

Otro mito del imaginario colectivo rojiblanco, Unai Emery, técnico que condujo al equipo por primera vez a la máxima categoría allá por 2007, también enviaba un sentido mensaje desde Birmingham, donde dirige al Aston Villa inglés: "Mando un gran saludo a toda Almería y especialmente a la UDA. El protagonismo es de Rubi, que cumple el máximo de partidos con el éxito que ha tenido y el que espero que tenga subiendo a Primera. Enhorabuena Rubi".

Rubi, que ha pasado por clubes como Espanyol, Betis, Huesca, Real Valladolid, Sporting de Gijón o Girona, alega que agradece la vida sedentaria de haber echado raíces en Almería: "Siempre he dicho que durante mi carrera he sido demasiado nómada, viviendo en muchas ciudades y disfrutando de rincones bonitos de España. Pero tenía ganas de echar raíces en un sitio y se dio en Almería. Estoy muy contento con la afición y las personas del club".

Echando la vista atrás con la perspectiva del tiempo, el preparador catalán se queda con la satisfacción del deber cumplido por la consecución del tercer ascenso en la historia de la entidad, que ahora quiere coronar con un cuarto: "Son muchas horas de trabajo, pero me quedo con el cariño de haber conseguido los objetivos que se han ido marcando. Es bueno que te recuerden con la sensación de la labor bien hecha. Por otro lado si es posible como una persona sencilla que vino a Almería, se integró en su ciudad y provincia siendo uno más con toda la humildad del mundo".

De la forma de trabajar con la actual propiedad saudí Rubi destaca que tienen clara la jerarquía de responsabilidades dentro del club y dejan libertad para desarrollarse profesionalmente sin inmiscuirse en la parcela técnica: "He trabajado con muchos presidentes, directores deportivos y propiedades, pero lo que me gusta del club es que tiene clara la escala. En el vestuario manda el entrenador, no hay duda de eso y los futbolistas tienen que seguir ese nivel para cumplir con su aportación".

Rubi: "Lo que me gusta del club es que tiene clara la escala. En el vestuario manda el entrenador"

Cuestionado acerca de cómo se siente haber entrado en la eternidad del universo rojiblanco, Rubi agradece los cumplidos, pero prefiere dejar ese término para otras profesiones de calado: "Ojalá dentro de unos años pueda pasarle el testigo a otra persona que seguro se sentirá muy afortunada. Esto es muy bonito, el fútbol atrae mucho la atención y pasas a la eternidad por una cosa que no es tan importante. La eternidad me suena más a pintores, científicos o médicos, pero contento de estar ahí".

La entrevista concluye con una mirada al futuro. Con dos años más de contrato por delante, Rubi espera poder cumplirlos pese a asumir que el fútbol es sumamente cambiante: "Tenemos unos objetivos muy claros definidos que queremos conseguir y a nivel personal a lo mejor se me echará tirando buenos tomates de esta tierra, pero mi idea es estar lo máximo posible, siempre y cuando la otra parte, afición y club, entienda que estamos haciendo un buen trabajo. Yo pelearé al máximo por alargar todo esto". Palabra de Rubi.