El último marcador que vio la afición en el Mediterráneo, le serviría al Almería

UD Almería

La hinchada regresa temporada y media después tras despedirse del Mediterráneo con un 4-0 ante el Deportivo de La Coruña

Desilusionada, animará a ver si los jugadores le responden en busca de una hazaña

El castillo de naipes, al suelo

Corpas y Juan Muñoz celebran el 3-0 ante el Deportivo el 7 de marzo del pasado año. El encuentro quedó 4-0. / Javier Alonso

El 7 de marzo de 2020, con el coronavirus goleando sigilosamente a la humanidad, el Mediterráneo viviría su último partido con público en las gradas. Fue un 4-0 ante el Deportivo de La Coruña, una goleada del fútbol de antaño, en el que los aficionados se abrazaban, cantaban, saltaban... Todo lo que se podía hacer hasta una semana después.

Entonces, por orden de Sanidad, el Mediterráneo cerró sus puertas a los aficionados y desde entonces, el primer equipo ha jugado a puerta vacía. El filial sí contó con aficionados durante un encuentro de promoción ante el Antequera, pero el amago de cuarta ola volvió a dejar el graderío vacío.

Cuatrocientos cincuenta y cinco días después, un año y tres meses, la afición del Almería va a regresar al Estadio de los Juegos Mediterráneos para ver al primer equipo. Nada que ver con cómo se despidió con la goleada ante el cuadro coruñés, en el que militaba Aketxe, pero con la necesidad de lograr ese mismo resultado, si no mejor.

El pésimo partido en Montilivi ha deshinchado la ilusión de la parroquia almeriense. La parte futbolera de la ciudad había amanecido motivada el miércoles y se acostó en estado semidepresivo. La noticia de que el CSD iba a permitir público en esta promoción de ascenso fue recibida con furor por los aficionados almerienses, que querían vivir una noche mágica, pero el rotundo y merecido 3-0 encajado en Gerona ha hecho dudar a más de uno si merece la pena ir este sábado al Mediterráneo. Realmente había esperanza e ilusión en Almería, que es había engalanado con banderas como en las grandes ocasiones, pero la poca actitud de su equipo se ha encargado de echar todo por tierra.

Pese a todo, la afición acudirá al Mediterráneo. Se van a distribuir mil quinientas entradas, que se van a agotar. Y si se dieran diez mil, también se agotarían porque los aficionados sí tienen orgullo. La mayoría de los aficionados que acudan mañana sábado al estadio tienen como último recuerdo del Mediterráneo el luminoso ante el Deportivo de La Coruña: 4-0. ¿Volverá a iluminar los mismos dígitos? Es el deseo.

Protocolo para la vuelta al estadio

LaLiga lleva meses preparando el protocolo de vuelta a los estadios de fútbol, que les ha ido haciendo llegar a los clubes que han podido meter público en estas últimas jornadas. Se trata de medidas de seguridad y sanidad básicas, de los que se cumple en cualquier momento del día en otros lugares públicos, como evitar acudir con síntomas, toma de temperatura, uso de mascarilla [en este caso será una FFP2], lavarse las manos y usar gel hidroalcohólico... Los aficionados recibirán sus entradas de forma telemática y tendrán que aportar su DNI para corroborar que son ellos para el acceso, habrá que llegar en la franja horaria fijada y un retraso de más de diez minutos puede provocar que no se permita el acceso. Una vez en su lugar en el estadio, no podrán moverse de su asientos, que estará perfectamente delimitado y separado de los aficionados ‘vecinos’. Además, no podrá haber contacto físico en el graderío ni en los momentos más efusivos por los goles. El bar permanecerá cerrado y se podrá acceder con agua, aunque siguiendo una serie de indicaciones que se darán. Los aseos tendrán un aforo reducido y la salida se hará también en grupos ordenados. Grosso modo, éstas son las normas más destacadas a cumplir en el Mediterráneo.