Y el Almería se acordó de Santa Bárbara

La primera pregunta que nos debemos hacer es clara y concisa: ¿por qué no ha disputado la UDA todos los partidos de foráneo como en Anduva? Habría que obviar los aspectos tácticos que influyeron negativamente siendo visitantes en otras ocasiones y el escaso trabajo táctico a nivel defensivo que se ha vislumbrado a través de toda la temporada, pero en más de una visita la concentración, las ganas, el ímpetu y la intensidad, elementos todos de la UDA presentes en Anduva frente a un Mirandés que disputaba el choque más importante de su historia, hubieran bastado para cosechar ciertos puntos que igual hubiesen sido suficientes para alcanzar cotas más altas. Dicho esto, habría que alabar ese espíritu que ya salió a relucir ante el Racing y que también genera puntos al igual que el buen juego.

Está claro que Rubi no supo durante la temporada motivar a sus jugadores o no era su idea de juego para que se dirigieran por ese rudo camino que exige una categoría como la de plata. Pero no hay que lamentarse más, sino aprender de los errores porque se está a tiempo de subsanarlos. Y el primer acierto reciente fue el cambio en la portería. No tuvo Fernando que intervenir en demasía, pero hizo una parada de las mejores que nunca le vi al guardameta murciano, que ya es decir. Podría parecer una salida fácil para achicar espacios, pero si uno observa esa gran ocasión del Mirandés advierte de la más que acertada decisión de Fernando al salir a tapar huecos entre la maraña de jugadores que había. Puede que un elevado porcentaje de arqueros se quedaran bajo palos en espera del remate del jugador del Mirandés pero Fernando, aparte de ser un gran portero, tiene la suficiente experiencia para tomar la mejor decisión en un momento tan importante.

Tanto, que puede valer un playoff. Es cierto que el Mirandés empujó mucho y que la fortaleza de este joven conjunto llegó a tener contra las cuerdas a un Almería que tuvo que convertir su peor virtud, la defensa de todo el bloque, en su tabla de salvación. Incluso contando al final, durante esos minutos tan agobiantes como decisivos, con jugadores que hasta el momento han aportado más rendimiento negativo que positivo, como Lázaro o Selvi. En verdad, no desentonaron. En realidad, toda la UDA se fajó como nunca (me sigue dando rabia esa circunstancia) para alcanzar un punto letal, que unido al increíble empate final del Racing en Elda, pone en bandeja de oro la clasificación para las eliminatorias de ascenso, a menos que la UDA lo haga rematadamente mal ante un Tenerife ya de Primera Federación. Bastante hay que seguir puliendo ante la hipotética segunda oportunidad que tendrá esta nueva UDA presidida por Mohamed Al-Khereiji, que ha entrado con muy buen pie.

Lo que no entendí fue el conformismo que manifestó Rubi en la previa del choque de Anduva ante la supuesta ausencia de un jugador como Pubill de cara al más que posible playoff . En esta misma temporada ya hay algún jugador que ha renunciado momentáneamente a su selección. Pubill tiene un excelente futuro y tendrá oportunidad de ser seleccionado, pero este cercano playoff es único. Una última pregunta al aire: ¿por qué se mantuvo tantos minutos a Arribas sobre el tapete de Miranda de Ebro? Este jugador se transforma como la masa cuando juega de local o de visitante. Son pequeños (o grandes) detalles a tener en cuenta en esos partidos que se avecinan a cara de perro si al final se accede a dicho playoff. Un último deseo es que el Racing logre clasificarse. A día de hoy le veo menos en forma que el nuevo Granada de Pacheta. Como se dice en estos tiempos, sí se puede.