El Almería acumulaba diez años sin ganar a domicilio en Primera dejando su portería a cero
UD ALMERÍA | Contracrónica
La última victoria con portería limpia lejos de casa databa del 19 de diciembre de 2014, cuando se ganó al Celta en Balaídos con un solitario gol de Hemed
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Almería/Pepe Mel exorcizó en Las Palmas muchos de los demonios que perseguían a la UD Almería en esta infausta temporada. En primer lugar frenó el marcador de partidos sin ganar en 31, cifra que es la mayor en la historia de la Primera División española, quedándose a solo una jornada de haber igualado el récord de las grandes ligas europeas, en poder del Derby County inglés desde 2008 con 32.
El triunfo en la isla, donde Mel se estrenaba en el banquillo indálico precisamente ante uno de sus exequipos, es también el primero en una década que la UDA firma a domicilio dejando su portería a cero. Desde la era de Alfonso García en la presidencia no se ganaba sin encajar goles. Fue un 19 de diciembre de 2014, cuando el equipo entonces dirigido por Juan Ignacio Martínez, que se estrenaba en Vigo como entrenador rojiblanco, se imponía al Celta en Balaídos por 0-1 con gol del israelí Tomer Hemed.
El once de aquella jornada estuvo formado por Julián Cuesta bajo palos junto con Ximo Navarro, Trujillo, Fran Vélez y Dubarbier en defensa, Thomas, Corona, Verza y Jonathan Zongo en el centro del campo y la pareja Édgar Méndez-Tomer Hemed en ataque. Esa temporada acabó en el segundo descenso a la categoría de plata de la historia rojiblanca, consumado en la última jornada ante el Valencia (2-3) con Sergi Barjuan en el banquillo.
La racha rota en el Estadio de Gran Canaria tuvo muchos nombres propios, el del citado Pepe Mel, que vino, vio y venció donde otros compañeros de profesión como Vicente Moreno, Alberto Lasarte o Gaizka Garitano se habían visto impotentes, pero también los de Marcos Peña, Jonathan Viera o Luis Maximiano. Del canterano almeriense de 19 años está casi todo dicho el las crónicas del partido. Debutó en una posición compleja como la de mediocentro defensivo pareciendo que llevaba una década en la máxima categoría. Viera fue ovacionado por la afición 'pío-pío' (hubo tímidos pitos acallados por las palmas) en su regreso a la isla tras sus desavenencias con García Pimienta y Maximiano firmó la mejor actuación bajo palos del curso (el luso ya suma unas cuantas) siendo clave en hacer la primera 'clean sheet' a domicilio en una década con más de media docena de paradas de mucho mérito.
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