Mojácar activa la maquinaria administrativa de su playa para perros
Playas caninas
El consistorio abre un periodo de información pública sobre este acotado en la playa del Perulejo
La playa para perros pasa de deseo a realidad en 2024 en Mojácar
El Ayuntamiento de Mojácar ha abierto un periodo de información pública sobre la solicitud de autorización administrativa para la ocupación del dominio público marítimo-terrestre, con destino a la implantación de una playa canina en la Playa del Perulejo hasta 31 de diciembre de 2027. El acuerdo será sometida a un plazo de 20 días de exposicion pública tras la publicación en el BOE (Boletín Oficial de la Provincia de Almería) para realizar las alegaciones pertinentes.
La maquinaria administrativa para la creación de una playa canina en el arenal del Perulejo, así las cosas, se ha puesto en marcha y la culminación de este procedimiento situará al de Mojácar como el segundo consistorio del Levante almeriense, tras Cuevas del Almanzora que la ha estrenado este verano, en habilitar una zona acotada para perros en una playa de su costa.
“El número de mascotas es muy elevado y tenemos la obligación de pensar en ellas, poniendo todas las iniciativas pública que podamos”, ha declarado el primer edil. La firme y decidida voluntad municipal de dar respuesta a esta demanda vecinal ha llevado al Ayuntamiento a consigmar una partida económica específica con este destino en los presupuestos municipales de este ejercicio.
“Vamos a poner en marcha la dotación de una de nuestras playas y vamos a instalar duchas y papeleras con sus bolsas de recogida de excrementos” ha declarado el alcalde de los mojaqueros/as. El Ayuntamiento ha incluido en el presupuesto municipal, documento económico de previsión de gastos e ingresos, la ampliación de la partida presupuestaria dirigida a la gestión de las colonias felinas mediante el CER. Estas iniciales responden a la captura, esterilización y regreso de los gatos y consisten en la captura de los gatos callejeros, proceder a su esterilización y saneamiento, para luego ser devueltos a su lugar de origen.
Asociaciones animalistas llegaron a sugerir que la playa canina se ubique en el entorno del Castillo de Macenas, por “ser un lugar adecuado al no ser zona de nidificación de aves, no tener flora protegida ni ser zona de tráfico de vehículos, y porque no es habitualmente utilizada por los ciudadanos para el baño”.
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