La Junta se involucra en el caso de agresión en el instituto de Purchena para velar por la "educación de todos"

El grueso del alumnado del IES Entresierras de Purchena continúa sin asistir a clase después de que el pasado viernes un grupo de padres y madres decidiera no enviar a sus hijos al centro por "miedo" a un alumno que se reincorporaba ese mismo día tras haber sido expulsado por agresión. Según una madre que prefiere permanecer en el anonimato por temor a represalias, el agresor tiene 15 años, dos años más que el resto de compañeros de su clase y habría atacado a otro chico "con intención de matarlo" a finales del mes de noviembre, motivo por el que fue expulsado del centro al que debía reincorporarse ese mismo viernes.

El menor, que procedía del Centro de Protección de Menores 'La Casa', especializado en jóvenes con problemas de conducta, llevaba apenas 15 días como alumno del IES Entresierras cuando atacó a otro compañero "con intención de matarlo" según relató uno de los alumnos testigos del incidente. El director del centro, Francisco Fernández asegura que, tal y como comunicaron al consejo escolar, hubo una agresión física de un menor a otro y que, siguiendo el protocolo establecido, se procedió a sancionarle de acuerdo a la gravedad de sus actos, en este caso, una expulsión temporal del centro que se extendía hasta el pasado viernes. Desde el centro se asegura a los padres y madres que "no hay riesgo" para los menores y que se ha impuesto una medida extra de seguridad al introducir un segundo docente en el aula.

Hoy, la Delegación de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de Almería de la Junta de Andalucía ha emitido un comunicado anunciando que su Servicio de Inspección ya se encuentra "ejerciendo labores de asesoramiento y acompañamiento al equipo directivo" del IES Entresierras con el "objeto de que se apliquen las medidas y protocolos oportunos" para velar por "el cumplimiento del 'derecho a la educación de todos'", buscando así un equilibrio entre el derecho de la inserción social del menor agresor que "encuentra en el sistema educativo uno de los pilares fundamentales" y el derecho de todos los alumnos y alumnas a la "protección contra toda agresión física o moral".

El IES Entresierras es el único instituto de esta pequeña localidad almeriense y la escolarización de los jóvenes del centro de menores local forma parte del proceso de reinserción de sus usuarios, cada año, el centro cuenta con entre 20 y 30 alumnos y alumnas procedentes de centro de menores y "en general no hay problemas", afirmaba el director.

Según cuenta Juan Matías Sierro, uno de los padres que se ha negado a enviar a sus hijos al centro, esta mañana ha tenido lugar una reunión entre el equipo directivo del centro con una inspectora de la Junta de Andalucía, "según lo que salga de esa reunión nosotros decidiremos si seguimos sin mandar a los niños a clase o regresamos a la normalidad", afirma. Según este padre, se encuentran en una situación compleja, "es duro para nosotros ver pasar los días y saber que nuestros niños no están dando clase, pero no podemos sino plantearnos qué es más importante para nosotros, si la escolaridad o la integridad física de nuestros hijos. Queremos que nos den una solución, no podemos enviar a los niños y pasar el día con el temor de que en cualquier momento nos pueden llamar para decir que ha pasado una tragedia", cuenta.