El sacerdote cuevano José Miguel de Haro será condecorado en Varsovia este lunes

EL Defensor de la Infancia de Polonia ha otorgado al sacerdote cuevano José Miguel de Haro, como Presidente de la Asociación “Acoger y Compartir”, la Insignia de Honor al Mérito en la Protección de los Derechos de la Infancia. La ceremonia de la entrega tendrá lugar este lunes, en Varsovia.

La condecoración reconoce su ayuda a menores víctimas de la invasión rusa, tanto en Ucrania como refugiados en Polonia. Es la primera vez que un español recibe esta distinción desde que se instituyó en 2013.

Está destinada a reconocer a ciudadanos, organizaciones e instituciones de la República de Polonia o de otros países por sus logros y compromiso excepcional en la protección de los derechos de la infancia. Además refleja la importancia de la colaboración transnacional en la promoción y protección de los derechos de la infancia, y destaca el impacto positivo de las organizaciones no polacas en este ámbito.

José Miguel de Haro, de 75 años y natural de Cuevas del Almanzora, es sacerdote redentorista que dedica la mitad de su tiempo a la acción parroquial en la iglesia de Las Lomas de Boadilla del Monte, en Madrid, y preside la Asociación ‘Acoger y Compartir’, organización que ayuda a los más necesitados en países como Haití. Antes en Octubre de 2019, tomó posesión como párroco de la iglesia Santísimo Redentor, enclavada en el distrito madrileño de Chamartín.

En 2010, inauguró la ampliación de la escuela de San Gerardo en Puerto Príncipe, Haití, un proyecto puesto en marcha por la asociación que preside para escolarizar y sacar de la calle a 1.200 niños. La escuela fue destruida por el terremoto de 2010 que provoco la muerte de 300 alumnos. “Hay un impulso que nos dice que hay que reconstruir la escuela. Como personas, tenemos la capacidad de transformar la realidad. La bondad humana y nuestra capacidad creativa son capaces de generar milagros”. ha declarado.

La asociación trabaja, desde entonces, para reconstruir la escuela y ayudar a los niños que se quedaron sin hogar en Haití con cargamentos de comida, ropa y con productos de primera necesidad.