Lo que puede venir de África por el MPOX

La OMS ha declarado la viruela del mono, ahora llamada mpox una emergencia de salud a escala mundial tras el aumento de casos en la República Democrática del Congo, pero no la ha declarado (aún) pandemia según informa la Prof. C. Raina MacIntyre en The Conversation.

La mpox, está relacionada con la viruela sus síntomas son fiebre, dolor de cabeza, inflamación de los ganglios linfáticos y dolor muscular. A continuación aparece una erupción, principalmente en la cara, las manos y los pies.

La situación en la República Democrática del Congo, en África central, es especialmente preocupante desde hace más de un año, ya que el tipo de mpox que padecen es el “clado I” que es más mortífero que la otra variante, pues “tiene una tasa de letalidad de hasta el 10 % (hasta uno de cada diez muere). En comparación, la tasa de letalidad es del 0,7% para la variante ómicron del SARS-CoV-2, el virus que causa la covid-19.

Como el mpox “es pariente” de la viruela y desde hace 40 años no se vacuna nadie de la viruela en el mundo, pues resulta que nadie es inmune a la viruela y hemos llegado hasta aquí.

En 2022 apareció una epidemia de viruela del mono del caso clado II que se transmitía por vía sexual, afectaba predominantemente a hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y tenía una cifra de fallecidos baja y había vacunas, pero ha habido un repunte en 2024. Y simultáneamente se estaban produciendo grandes epidemias del clado I en la República Democrática del Congo, pero sin prestarle mucha atención, y la mayoría niños.

La vacuna llamada Jynneos, Imvamune o Imvanex es eficaz, pero escasea en la República Democrática del Congo. Y claro está, si nos acordamos de la difusión y la extensión de la Covid, es normal “acongojarse” por la forma en que se puede extender esta infección, tan fácil de evitar con fabricar y distribuir bastantes dosis de vacuna.

Tengamos en cuenta que en el último mes, el virus se ha propagado a países fronterizos con la República Democrática del Congo: Ruanda y Burundi, así como Kenia y Uganda, todos ellos países en los que nunca se habían dado casos de mpox. O sea, que propagarse, se está propagando, eso no se puede discutir, y primero por los próximos como es lógico, por lo tanto, es difícil saber cuándo y hasta dónde, pero sería bueno atajarlo cuanto antes.

¿Cuántas personas tienen que morir para ponerse a fabricar vacunas? ¿A qué están esperando? ¿Es que alguien o “alguienes” tienen que dar algún permiso?