Suelo industrial

Si de algo ha carecido la ciudad de Almería ha sido de suelo industrial donde ubicar sus polígonos. De ahí la importancia económica que se ha desarrollado en otros pueblos del entorno de la capital. El ayuntamiento, por fin, parece que intenta paliar este desaguisado que le viene ocurriendo desde hace décadas a la ciudad. El Pita se creó por orden y norma de la Junta, y con el dinero de las dos cajas de ahorros de la ciudad. La historia de cómo se compraron aquellos terrenos no viene a cuento, pero no estaría de más que los ciudadanos la conocieran. ¡Los chorizos de Serón son exquisitos!

Tras la puesta en marcha del Pita, una empresa de camiones trató de traer a su tierra una gran parada para los mismos. No recuerdo los metros necesarios, o los puestos de trabajo que se iban a crear, la plataforma nacional de los mismos, que andaba por tierras catalanas, se venía a Almería. ¡Qué pena! En aquellos terrenos la junta y las cajas podían invertir, estas últimas con desgana, pero obligadas por los políticos del Psoe de entonces, pero solo ellos. Cualquier empresa que se quiso ubicar en los terrenos adyacentes no recibieron los parabienes de la administración. Y los camiones siguieron en el norte, y nosotros cuidando a los lagartos del Pita.

En estos días nos están contando los años que lleva el Pozo intentando en unos terrenos del entorno del parque ubicar un sector de su empresa. Y el ayuntamiento acaba de darle la bendición. Hora era. ¿Está todo hecho? Eso nos gustaría, saber que está todo hecho. Hay que esperar lo que tenga que decir Moreno Bonilla, pero no olvidemos lo que puedan achacar a la futura empresa los ecologistas, que vieron muy bien el parque del Pita (nunca se supo a cambio de qué, pero se lo pueden imaginar), y que ahora las dudas empiezan a sonar en los despachos.

Si Moreno se hace un Rajoy o una Soraya, no tendremos suelo para el Pozo, si Bonilla mantiene el apoyo dado por el ayuntamiento a la empresa, al lado del Pita podremos ver crecer una empresa que ofrezca puestos de trabajo a los almerienses del futuro. En esas estan. Hay que agradecer la valentía de la corporación de María a la hora de llevar a pleno y aprobar el cambio de suelo, e imagino que cuando lo ha hecho es porque lo habrá consultado con las voces que en Sevilla tienen cerca al presidente. A esperar toca. Y nos gustaría ver que desde las orillas del padre Betis no solo se habla de destruir el Algarrobico, abajo con él, que también se preocupan del futuro de esta tierras y de sus gentes.