Sus señorías no achican agua

El miércoles de la semana pasada, cuando los muertos ya se contaban por decenas, el Congreso suspendió la sesión de control pero mantuvo el pleno urgente que el PSOE forzó para validar el proceso de renovación del Consejo de RTVE. Vox, PP (aunque a saber qué habrían hecho si gobernaran) y Compromís (los disculpamos al ser valencianos) se ausentaron del hemiciclo porque no entienden, los muy obtusos, que lo verdaderamente perentorio en este país, de ahí las prisas aunque caigan 500 litros por metro cuadrado en algunas zonas, es lograr una RTVE con rigor, pluralidad, calidad y, sobre todo, independencia. Y, además, como dijo Aina Vidal, de Sumar, que sonaba (lo que nos vamos a perder) para sustituir en la portavocía parlamentaria del grupo al presunto sátiro del núcleo irradiador, “los diputados no estamos para ir a Valencia a achicar agua”. Claro que no, pero tanto ella como Patxi y Rufián, insuperables también en sus argumentos para no suspender el pleno, no se callan ni cuando toca. Posponer esa votación que cambia las mayorías parlamentarias para la elección de los consejeros (de diez, más la presidenta, se pasa a quince, once que decide el Congreso y cuatro el Senado, y, lo más importante para ellos, de cobrar sólo unas dietas por cada reunión pasarán a percibir más de 100.000 euros al año); aplazar esa votación, decía, implicaba unos riesgos, pues más adelante Esquerra y Junts podrían exigir ganar doscientos mil: “Es que trabajar para que el Estado opresor tenga una televisión independiente es mucho sacrificio para nosotros, compréndanlo”. Saben que con Pedro pueden conseguir lo que quieran. Así que gracias a que sus señorías no achican agua, tenemos ya a once señores y señoras, todos propuestos por el Gobierno y sus socios, que se van a dejar la piel por una televisión pública excelente, que son cien mil pero con dedicación exclusiva, ojo, que por eso no puede estar Bolaños (estará su jefa de prensa) ni la Fallarás, por ejemplo, que hubiera sido un gran fichaje por Podemos. Pero están Sergi Sol, por Esquerra, jefe del gabinete de comunicación de Junqueras durante el procés, y Miquel Calçada (antes Miguel Calzada), por Junts, más conocido como ‘Mikimoto’, indepes radicales ambos que a ver si se contienen y no exigen algún programa que empiece con un ‘Buenas noches y puta España’, al estilo de TV3, aunque ya daría igual. ¡Qué tele tan estupenda nos va a quedar con esta gente!