Reilusionarse

Reilusionarse es la mejor manera de manejar el estrés. El ser humano es mucho más que un cuerpo. Acoge un alma con la que forma una unidad y, en una sociedad que se conmueve entre la idolatría del cuerpo o su rechazo, la persona necesita revelar su altísimo valor para ser reflejo de uno mismo.

La productividad en las mujeres de hoy en día ha corrompido nuestro tiempo libre. El ritmo frenético en el hogar, en el trabajo y en el ocio nos deja exhaustos incluso en vacaciones. Por eso, saber parar para volverse a ilusionar es imprescindible para recobrar la armonía con una misma y con los demás.

A la vuelta de septiembre, volvemos cargados de buenas intenciones para reesperanzarnos. Hacemos listas de muchas cosas: de tareas profesionales pendientes, de libros por leer, de películas por ver, de lugares que visitar, deportes por probar… pero pocas veces hacemos listas que nos ayuden a mejorar en algo. En nuestro crecimiento interior no debería haber vacaciones. Es más, posiblemente, las vacaciones laborales son el mejor momento para afanarse en ese desarrollo profundo como personas.

Entre esas claves está “reilusionarse” con actividades de calidad. El ocio debe ser uno de los espacios más gratificantes del ser humano porque después de una semana de trabajo intensa, lo que te apetece es no hacer nada. Sin embargo, yo aprovecho al máximo esas horas con actividades que realmente me satisfagan, y que antes hacía porque me ilusionaban y recuperaba la motivación.

Reilusionarse es poder afrontarse a las situaciones difíciles, en modo positivo. El gurú del optimismo inteligente, Luis Galindo en su libro titulado así resume un nuevo movimiento que tiene más de 70.000 seguidores en la red. Su impulsor, adalid del optimismo inteligente, da conferencias internacionales e imparte seminarios de motivación y liderazgo a empresas.

Otra de las dos recomendaciones es ilusionarse por “los millones de cosas potencialmente interesantes que existen en el mundo” y dejar de vivir en modo automático y pasar al modo disfrute”. El optimismo inteligente, es una manera de afrontar los problemas de manera positiva y activa y cambiar la actitud con la que se camina por la vida” porque pensar cansa.

Desde el Foro Mujeres y Sociedad sabemos que la re-ilusión es un bien escaso. Cuando hablas de futuro con ilusión el cerebro produce endorfinas y, además, si practicamos el agradecimiento la huella perdura más tiempo en nuestro cerebro con lo que se concluye que las personas agradecidas son las más felices de este mundo.