Recordando a Obiang Nguema

Teodoro Obiang Nguema, Presidente de la República de Guinea Ecuatorial desde 1979, es compañero mío de Promoción de la Academia General Militar. Compartimos el curso 1964-1965, con Teodoro y 9 compañeros más de Guinea, cuando aún era parte de España. Estos diez Caballeros Cadetes (CC) se integraron perfectamente en el conjunto de la XXII Promoción. Ellos eran conscientes de que estaban llamados a ser los dirigentes de su país algún día y además del Presidente, los otros nueve ostentaron cargos importantes en alguna de las áreas del Gobierno de Guinea Ecuatorial. Los diez compañeros guineanos estaban repartidos en distintas clases, pero para las horas de estudio, que teníamos por las tardes, los concentraban a todos en el aula 9, que era mi clase. Este detalle me permitió conocerlos algo más en profundidad que otros compañeros.

Recuerdo perfectamente a Cristino Seriche Bioko y a Eulogio Oyó Riquessa, ambos con un gran sentido del humor que, si no hubiese sido por su color moreno que los delataba, hubiesen pasado perfectamente por andaluces de Sevilla o Cádiz. Teodoro Obiang en cambio era un hombre serio que sin duda pensaba en la responsabilidad que iba a tener en un futuro próximo. No voy a entrar en la forma que llegó al poder en una situación difícil con sus luces y sus sombras, pero el caso es que ha transformado el país y la moderna Malabo actual nada tiene que ver con la antigua Santa Isabel. Quiero comentar simplemente cómo un compañero de promoción, hoy en día es Presidente de la República de Guinea Ecuatorial y algunas de las vivencias que compartimos.

De los 10 guineanos solo quedan vivos el Presidente Obiang y Melanio Ebendeng, pues Cristino Seriche me comunican que ha fallecido el 11 de junio pasado. En 1979 Cristino junto a Obiang participó en el golpe de estado que derrocó a Francisco Macias y ostentó el cargo de primer ministro durante 10 años. También estuvo al frente de otros ministerios

A finales de julio (21-7-24) La Razón publicó la entrevista que hizo José Antonio Vera a Obiang Nguema y hay en algunas respuestas a las preguntas formuladas un sentimiento de españolidad que me emocionaron y agradaron profundamente. Porque África en general sigue viviendo en la Edad Media y Obiang ha sabido darle un toque de modernidad y progreso a su país y aprovechar la riqueza que ha supuesto el hallazgo de petróleo en su territorio; es consciente de que su duración es finita y por eso quiere invertir en turismo y agricultura; porque al final lo que quita el hambre lo produce el campo. Guinea también cuenta con importantes yacimientos minerales y es el segundo productor mundial de bauxita. Malabo, la antigua Santa Isabel, situada al norte de la isla de Bioko (conocida por nosotros como Fernando POO) es la capital de Guinea Ecuatorial, pero ya se está construyendo en la parte continental la nueva capital del país que se llamará Ciudad de la Paz.

Obiang afirma que “La monarquía es símbolo de la unidad de España y de la Hispanidad en el mundo”. Son dos conceptos que muchos españoles quieren romper: España e Hispanidad. Solo puedo decirte Señor Presidente, amigo Teodoro, que me siento orgulloso de ti y que la semilla que sembraron aquellos profesores de la Academia de Zaragoza sigue dando buenos frutos.

Mi buen amigo y compañero de promoción Virgilio Calama estuvo en Guinea Ecuatorial algo más de dos años (1983-1985) en calidad de asesor en múltiples asuntos, normales por otro lado en un país que empezaba a despegar. Su conversación amena me aporta infinidad de datos y vivencias interesantísimas. Como militar asesoró al Presidente y resolvió los problemas que surgían diariamente, desde la formación de Oficiales y Suboficiales en el Tercio Don Juan de Austria, el nuestro, el de Almería, que en aquellos años estaba en Fuerteventura y formando Artilleros en Las Palmas y en Sevilla. También formó a los becarios en Topografía, Tiro, Orientación con la brújula (para ellos auténtica brujería) Gimnasia de combate, Yudo etc. Siempre activo y con buen sentido del humor, Virgilio me cuenta que equiparon con los colores del Sevilla a los del continente y con los del Betis a los de la isla Bioko, enfrentándolos el 3 de agosto de 1984; encuentro que fue presidido por el Presidente Obiang.

La Hispanidad sintetiza la Historia de España. ¡Salvémosla!