La Tapia con sifón
Antonio Zapata
Pimentón en Nochevieja
Estamos tan entretenidos con las acusaciones de las que se ha servido Víctor Aldama para que el magistrado Santiago Pedraz le ponga en libertad, con el visto bueno del fiscal anticorrupción Luis Pastor, que asuntos que me parecen de gran importancia, transcurren sin apenas transcendencia. Hasta la fecha, la mayoría de las acusaciones del presunto delincuente no han sido probadas, algunas han sido desmentidas y otras están en entredicho. En fin, el tipo anda suelto haciendo declaraciones y nos tiene pendientes de lo que pueda desvelar en el siguiente capítulo. Mientras tanto, ocurren cosas a las que se les debería de prestar mayor atención y son noticias de un día. Desde hace meses se ha estado intentando solucionar el problema de los MENAS, “menores extranjeros no acompañados”, que llegan a Canarias y a Ceuta. A propuesta del Gobierno de Canarias, donde cogobierna el PP junto a Coalición Canaria, se trataba de hacer una reforma en el artículo 35 de la Ley de Extranjería para que las comunidades autónomas se vean obligadas a acoger a menores, en lugar de hacerlo cuando les parezca oportuno. En principio, Alberto Núñez Feijoo se mostró partidario de colaborar con el Gobierno Central para llevar a cabo dicha reforma. “La solidaridad de las comunidades del Partido Popular está garantizada”, fueron sus palabras en unas declaraciones a los medios de comunicación. Para llegar a un acuerdo se han celebrado reuniones donde han participado el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática Ángel Víctor Torres, el portavoz del PP en el Congreso de los Diputados Miguel Tellado, el presidente de Canarias Fernando Clavijo y el presidente de Ceuta Juan Vivas. El problema es que los populares acudieron al último encuentro amenazados por VOX, advirtiendo que no apoyarían los presupuestos en las comunidades autónomas donde el PP necesita su ayuda, si pactaban con el PSOE la reforma de la Ley de Extranjería. Esas son palabras mayores. Como no podía ser de otra manera, ante dicha amenaza, los populares dan marcha atrás. Las negociaciones para abordar el problema de la acogida de menores migrantes y acabar con el colapso que sufren Canarias y Ceuta, haciendo un reparto equitativo entre las comunidades autónomas, termina sin llegar a un acuerdo. VOX, que en la derecha tiene la vara de mando, impone su criterio y no se habla más del tema. Ahora estamos pendientes de quien aparecerá en la próxima foto que nos muestre Aldama.
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