El PP, un freno al progreso

Las bonitas fotos que se hace la alcaldesa, María Vázquez, para sus redes sociales con niños y niñas o con perritos de anuncio (unas fotos que, por cierto, cuestan a las arcas municipales 76.000 euros al año) no van a poder ocultar la sucesión de torpezas en su gestión del día a día del Ayuntamiento. En tan solo un año de mandato, la alcaldesa ha conseguido que nuestra ciudad sea noticia en los informativos nacionales e, incluso, internacionales, por la distribución de un cartel publicitario que parecía incitar a la pederastia y por provocar la muerte de varios animales protegidos de la Estación Experimental de Zonas Áridas del CSIC. En menos de 365 días ha incumplido su compromiso de no subir impuestos, con el hachazo al bolsillo de los almerienses que ha supuesto la subida del IBI y está pendiente el incremento de la factura del agua, que vendrá en breve. Su última torpeza: el Ayuntamiento va a tener que devolver 800.000 euros de fondos europeos por no culminar en plazo las obras de rehabilitación del antiguo cine Katiuska en Pescadería. Unas obras que comenzó anunciando el anterior alcalde, Ramón Fernández Pacheco, y que ha seguido proclamando la actual alcaldesa. Ni uno ni otra han sido capaces de dar prioridad a una actuación cuya financiación europea estaba condicionada a ser justificada antes del 31 de julio, por tanto, hay que devolver esos 800.000 euros. Ese dinero, puesto que las obras están a la mitad, tendrá que salir ahora del bolsillo de todos los almerienses. Concretamente, 793.323,45 euros que se podrían haber empleado en medidas para fomentar el acceso de los jóvenes a su primera vivienda, en la construcción de nuevos parques infantiles, en la mejora de los centros educativos o de las instalaciones deportivas que tan necesitados están de una inyección de inversión. No es la primera vez que la arbitraria gestión del PP nos hace perder dinero. Dos millones de euros han sido reintegrados a la Junta de Andalucía por la no ejecución del programa Eracis para zonas desfavorecidas y han dejado escapar programas de empleo como el ‘Joven Ahora’ dotado con 2,7 millones o los tres millones del ‘Plan Aire’. Caen mantras como castillos de naipes, la de años que hemos escuchado que la derecha gestionaba mejor. Nada más lejos de la realidad. El PP, tras dos décadas liderando el Ayuntamiento, se ha erigido en un obstáculo para el avance de nuestra ciudad, la cual prospera gracias al dinamismo y determinación de los almerienses y no por contar con un Gobierno municipal que pueda presumir de una gestión excelente.