¿Politizado o manipulado?

Según doña Teresa Heredia, el Cristo de la Luz, desde que ha llegado el Pp al poder en el ayuntamiento de Dalias viene siendo politizado. Y es posible que no le falte un punto de razón a la portavoz del Psoe en el municipio. Si hablamos de la edición de este año, la señora en cuestión se apunta un tanto. Lista ella, se debió dar cuenta, o quizás le dijeron, si no estuvo presente en el acto, que el pregonero de las fiestas era un importante político de la capital: El portavoz del presidente de gobierno en la provincia de Almería.

Teresa, que no es marquesa “viruli, virulesa”, por ello se hizo sanchista, tiene razón cuando denuncia sobre las fiestas de su pueblo: Que El Cristo de Luz de este año ha sido politizado. Y no solo por el pregonero, también porque ha sido el primer año, que se sepa, en el que una mujer, política ella, caso de Carmen Crespo, le hiciera entrega al Cristo de Dalías de la bandera de Europa. El pregonero un hombre del Psoe, la entrega de la bandera, una mujer del Pp. Teresa, a tu Cristo lo han politizado este año.

Me llamó la atención la foto en la que Crespo aparece haciendo entrega de la azul. Un alcalde entregado, se veía feliz, un presidente o hermano mayor con cara de arrobo, una eurodiputada sonriente y un cura, algo apartado del eje central de la foto, que no parecía que iba con él la historia que se estaba viviendo en el altar de su iglesia. Y lo entiendo. No creo que esté el Cristo de la Luz, con la que está cayendo en la vieja Europa, para banderas, banderías y sonrisas milagrosas a los políticos. Pero es cierto, Teresa, la no marquesa, que el Cristo de este edición ha estado bastante politizado.

No estoy seguro si el Cristo oyó el pregón de José María Martín, socialista-sanchista él, como tampoco si le ha interesado la bandera ofrecida por la eurodiputada. Lo imagino más preocupado por las cientos de guerras y guerrillas en las que andan metidos los seres humanos, esos por los que dicen bajó a esta tierra llena de odios, políticos y no políticos, y dio la vida por ellos. Debe ser un panorama desolador lo que puede ver desde las alturas. En España, y hasta en Dalias, los de derechas y los de izquierdas de peleas eternas, llenando de mentiras los días y las semanas, y encima, cuando llega su momento, cuando el pueblo se dispone a celebrar su fiesta, aparecen representantes de los dos partidos con lisonjas, milongas y banderas. Cristo de la Luz, en qué manos los dejaste.