Luces y Razones
Antonio Montero Alcaide
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La semana pasada el gobierno de Pedro Sánchez ha conseguido sacar adelante dos iniciativas de gran importancia, pero lo que ocupa las pantallas son las declaraciones de un presunto delincuente que, con acusaciones sin pruebas, ha logrado salir de prisión. Vayamos a los hechos. En cuanto a la primera iniciativa, el Partido Popular ha intentado por todos los medios impedir que Teresa Ribera, candidata a vicepresidenta de la Comisión Europea, fuese nombrada para ocupar dicho cargo y, como se suele decir, les ha salido el tiro por la culata. El Partido Popular Europeo ha apoyado la propuesta del Gobierno de España. Teresa Ribera ha sido nombrada vicepresidenta de la Comisión Europea y los populares españoles han fracasado en el intento. En cuanto a la segunda iniciativa, no era nada fácil sacar adelante la reforma fiscal, cuando, para ello, la ministra de hacienda María Jesús Montero tenía que conseguir el apoyo de partidos políticos con distintas posiciones ideológicas. La negociación fue compleja y durante el tiempo que duró, parecía imposible que se pudiese llegar a un resultado satisfactorio. Tras larga negociación se vencieron los obstáculos y la reforma fiscal ha sido aprobada en el Congreso de los Diputados con 178 votos a favor y 171 en contra. De no haberse aprobado se habrían perdido 5.000 millones de euros en recaudación y 7.200 millones del quinto desembolso de los fondos europeos. Estas dos cuestiones son hechos que producen efectos fehacientes. Con la primera iniciativa la propuesta del Gobierno consigue que España tenga una presencia importante en la Comunidad Europea, con Teresa Ribera al frente de uno de los cargos de mayor peso en el Ejecutivo de Von der Leyen. Con la segunda iniciativa se establece una estabilidad del Gobierno, con perspectivas de aprobar los presupuestos y consolidar la legislatura. Frente a estas operaciones que producen efectos positivos, lo que ha calado en el ambiente y nos tiene entretenidos son las declaraciones de un presunto delincuente acusando sin pruebas a Pedro Sánchez y a miembros de su gobierno. De todas las acusaciones de Víctor de Aldama, que así se llama el sujeto, la que me parece más curiosa es la que se refiere a Pedro Sánchez asegurando que fue el presidente del Gobierno de España quien pidió hacerse una foto con el presidente del Zamora club de Fútbol. Y habrá quien se lo crea. De lo que no cabe duda, es que tenemos culebrón para rato. Menudo Fantasma.
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