También hay noticias positivas

Entre tantos titulares deprimentes que tenemos hoy los columnistas para soltar adrenalina, hemos elegido uno positivo. Dejamos de lado los siguientes: el Tribunal Penal Internacional ordena la detención de Netanyahu por crímenes de guerra. La policía brasileña acusa formalmente a Bolsonaro de intento de golpe de Estado. Putin da un paso más para el uso de “otras armas” en Ucrania; a los países nórdicos y los bálticos no les llega la camisa al cuerpo. Aldama se lía en una manta mediática para escapar de su multimillonario fraude fiscal. Y paramos para que nos quede sitio para nuestro tema: la noche del jueves tuvo lugar en la espectacular sede de Cajamar en el PITA un “Foro de donaciones” –el primero de este tipo que se celebra en Andalucía- para recaudar fondos para tres proyectos cuyo objetivo común es la integración de los inmigrantes en Almería. Los proyectos han sido seleccionados por la Fundación Almería Tierra Abierta (ALTA) con el entusiasta apoyo de la Asociación Española de Fundaciones y las organizaciones internacionales que la misma arrastra. Los proyectos son: “Integralmería”, de la Asociación de Estudios Almerienses, con cursos de español, actividades deportivas, sociales, etc., dedicadas especialmente a la juventud. “Viviendas para la vida”, de SJM (jesuitas) viviendas y edificios comunitarios. Y “Almería para todo y todos” de una asociación colombiana para crear una cooperativa de trabajos sociales. A la primera la apadrina BioSabor, a la segunda, Cosentino, y a la tercera Joaquín Moya-Angeler.

Hubo una participación nutrida y un resultado económico excelente: se cubrió sobradamente el objetivo más optimista: casi se llegó a los 50.000 €. Para nosotros es muy relevante la participación de grandes empresas almerienses. Además de las ya citadas, es destacable que hubo representantes del sector agrícola, que se “retrataron” con generosidad, demostrando que son conscientes de lo que les afecta este problema, el de la integración de los trabajadores inmigrantes. Es importante que estén liderando esta actitud, en contra de lo que se percibe muchas veces en el sector en general, porque como dice la frase ya consagrada: “a las ocho de la mañana necesitamos a los inmigrantes y a las ocho de la noche nos molestan”. Es una vergüenza el chabolismo, pero también es clave la normalización de la convivencia. Vivimos en un mundo multirracial y conviene que nos adaptemos. Por la cuenta que nos trae.