Opinión
Referentes en inclusión
A Vuelapluma
Cualquier día es bueno para que alguien o algo te reviva un recuerdo alegre, una anécdota divertida, un suceso, así como cualquier vivencia que te resulte satisfactorio rememorar.
Viene esta introducción a cuento de una vivencia que he tenido el pasado domingo, día 13, gracias a RENFE, que no quiero ni puedo dejar en mi interior, que tengo que exteriorizarla y compartirla con cuantos más prójimos, mejor, ya que hacer lo contrario sería un acto de puro y exacerbado egoísmo.
En resumen, mi agradecimiento a RENFE se debe a que el domingo pasado me rejuveneció más de 50 años y, aunque sólo fue durante menos de 7 horas, que me pasaron en un plis plas, estuve como levitando, casi sin vivir en mí.
Viajé en un tren de RENFE que yo juraría que era “pariente” y casi, casi, que coetáneo del que me llevó de Almería a Granada, cuando empecé la carrera en el 69. ¡Casi “ná”!. Por ponerle algún defecto, el asiento de los trenes del 69 lo recuerdo algo más consistente que el del domingo, que estaba algo más hollado que los de mi juventud. ¡Un viaje en el tiempo y en el espacio! ¡Gracias!
También te puede interesar
Lo último