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La Academia General Básica de Suboficiales este año está celebrando el 50 aniversario de su fundación el 31 de mayo de 1974, ubicada entre los municipios de Talarn y Tremp en la comarca del Pallars Jussá (Lleida), con la leyenda “A España servir hasta morir”, lema patriótico cuya inscripción se visualizaba con piedras blancas en la falda del monte Costampla y adoptado mayoritariamente por nuestro Ejército.
50 años desde que el 1 de abril de 1974, aprobada por las Cortes Generales del anterior régimen político bajo la presidencia de Alejandro Rodríguez de Valcárcel, se publicase en el BOE, núm.78, la Ley 13/1974, de 30 de marzo, de organización de las Escalas Básica de Suboficiales y Especial de Jefes y Oficiales del Ejército de Tierra.
Esta Ley recogió las bases generales de una nueva organización en las Fuerzas Armadas, la cual se desarrollaría con mayor detalle y agilidad a través de otras disposiciones, teniéndose en cuenta, cuanto por su contenido positivo debe mantenerse en vigor de la legislación que existía, habiéndose alcanzado el máximo nivel de eficacia en el cumplimiento de las misiones del Ejercito de Tierra, mediante la eficiencia y el aprovechamiento racional del personal procedente, especialmente, de clases de tropa, proporcionando al mismo tiempo la debida igualdad de oportunidades, estimulando la iniciativa y esfuerzo personal al hacer que los ascensos no dependieran exclusivamente de la antigüedad, solucionando al paso problemas que existían y refundiendo en un único cuerpo legal la profusa legislación.
Ser Suboficial del Ejército supone ejercer el mando y la iniciativa correspondientes para transmitir, cumplir y hacer cumplir, en todas las circunstancias y situaciones, las órdenes e instrucciones recibidas y asegurar la ejecución de las tareas encomendadas a nivel operativo, técnico, logístico, administrativo y docente.
Lo cierto es que la condición de suboficiales es tan antigua como la España que conocemos hoy y nos la quieren desvertebrar. Como enlaces necesarios entre la oficialidad y la tropa, como ejecutores de la labor de coordinación y transmisión del mando, aparecen como sargentos en la época de los Reyes Católicos, allá por el año de 1494 en la Guardia de Castilla.
Será en 1912 cuando la figura del Suboficial aparece en la legislación militar, siendo su impulsor el General Agustín de Luque y Coca, Ministro de la Guerra en el Gobierno de José Canalejas durante el reinado de Alfonso XIII. Feliz 50 aniversario. Paz y Bien.
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