Escondida en la Semana Santa

Ynoasí nos la trajo la subida de la basura la alcaldesa, escondida en un martes de Semana Santa, cuando los ciudadanos están preparando sus trajes de penitentes, sus viajes de cuatro días, sus lágrimas ante la amenazante lluvia en sus días de salida de procesión. Son tos por igual. Buscan el día en el que pueda tener menor repercusión en los medios, y sean menos los vecinos en enterarse de que el próximo recibo de la basura viene cargado, y no de rosas. No están pensando, ni tienen tiempo, en plena Semana de pasión, de lo que le está intentando esconder el equipo de gobierno popular del ayuntamiento.

Pudieron convocar el pleno antes de comenzar la semana, o dejarlo para la vuelta, pero no, en medio de un par de temas sin demasiada importancia, aparece la subida de la recogida de basura. Dicen que por obligado cumplimiento de una directiva europea. Siempre es por obligación de alguien, nunca porque ellos a les guste. Y no lo entiendo. Si están subiendo la basura por culpa de la Von der leches y el guapito de Moncloa, a qué viene convocar el pleno casi a escondidas, en medio de la SS y sin darle cuartelillo al pregonero. Llegan a ser tan mentirosos nuestros políticos, los de una cuadra y la de enfrente, que, si pensamos mal los ciudadanos, habitualmente no nos equivocamos.

La subida tiene migas, en torno a 132 euros va a ser el nuevo recibo de la basura en la capital. Si el promedio está en torno a los sesenta, no podemos hablar de subida, más bien de subidón y de los gordos. Tanto, que, hasta los miedosos a la hora de dar la información, María del Mar y sus mariachis, contaban que van a rebajar un par de impuestos. El primero el del Ibi, al que le dieron buena marcha hace poco. Entonces era otra obligación lo del Ibi, por ley había que subirlo, y rebajarlo ahora ¿también es por ley? No se puede confiar en esta gente, no son sinceros, andan siempre a escondidas y cuando pueden, como es la subida de la basura, te dan el susto el medio de la Semana Santa. Mientras tu andas intentando ser un buen chico por aquello de que el cielo te puede estar esperando, llega María la alcaldesa, y te clava la lanza en el costado, para que sepas lo que es bueno y te fíes del candor que desprenden estos días de recogimiento y fervor mariano a las calles la ciudad.

En los pueblos ya se conoce este abuso, pero como todo lo que hacen los políticos, por cojines, y si no pagas, viene el embargo, que en eso Diputación es un hacha.