Ante el dolor, amor y esperanza

Semanas de tragedia y dolor por la gota fría que de momento ha dejado 222 muertos reconocidos y 78 desaparecidos. Hay 54 cadáveres aún sin identificar. Entre todo este sufrimiento, la vida se abre paso y encontramos testimonios por doquier de la bendita solidaridad de los españoles.

La tragedia de Valencia y demás zonas dañadas también hace brillar el Bien, “se puede reconocer en medio del dolor la presencia de Dios”, dice el padre Sergio Pelarda Caurín. Miles y miles de personas han acudido a socorrer a los pueblos devastados. Mano a mano religiosos y laicos. El joven cura ha estado y está ayudando en Algamesí y cuenta que lo que más le llamó la atención fue la alegría de los voluntarios, dándolo todo, preguntando casa por casa qué necesitan a estas personas que lo han perdido todo.

“El Evangelio hecho vida” dice el P. Sergio. La mayoría de los afectados por la terrible gota fría responden agradecidos a la incansable atención que reciben, el Amor saca Amor. Muchos se preocupan más por sus vecinos que por ellos mismos.

La familia es, siempre, el refugio y el consuelo que da fuerzas. Las parroquias y Cáritas, también los Bancos de Alimentos, se han volcado para ofrecer ayuda material y también espiritual. A veces un abrazo o enjugar sus lágrimas es lo mejor que les podemos dar. Un hombre en Alfafar le preguntó al padre Sergio ¿dónde está Dios? y el P. Sergio, mostrándole todo el trabajo que hacían con entusiasmo, sin quejarse de nada, sin esperar nada, solo por puro amor cristiano le respondió: ¡aquí está Dios! Aquí, ¿no lo ves? ¡Aquí está Dios!

Si hoy nos preguntamos ¿pero qué funciona en España?, la respuesta sin duda es el voluntariado. Sin ese amor por servir al bien común, muchas poblaciones de Valencia aún seguirían bajo el barro. ¡La solidaridad con quien sufre!, ese es el corazón que late y que resucita. Ante el dolor, Amor y Esperanza - Los Estudiantes-.

Esta semana pasada, también hemos recordado a los Santos y Beatos mártires de la persecución religiosa del Siglo XX en España. Y de ninguna manera hemos olvidado a ¡la Almudena!, patrona de Madrid. A Ella, a la Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia, cuya advocación mariana en Almería capital se encuentra a veneración en la Iglesia parroquial de Santa Teresa de Jesús - Pasión -, y al Inmaculado Corazón de María -Virgen del Mar-, nos encomendamos y pedimos protección para que guarde y proteja España bajo su precioso manto. ¡Viva España y Viva Cristo Rey!