08 de agosto 2024 - 03:07

Yo nací en esta ribera del Arauca vibrador. Soy hermano de la espuma, de las garzas, de las rosas... Amo, río, canto, sueño. Con claveles de pasión, con claveles de pasión”. Este es un fragmento de los versos de Alma Llanera. Esta sublime canción, un joropo, es para los venezolanos su segundo himno nacional. Forma parte de la zarzuela homónima. El autor de la letra es Rafael Bolívar Coronado y la música es de Pedro Elías Gutiérrez. La zarzuela se estrenó el sábado 14 de septiembre de 1914, en el Teatro Caracas, conocido popularmente como “Coliseo de Veroes”.

El socialismo del siglo XXI creado por Fidel Castro, ha armado un modelo de dictadura que no es la clásica tiranía. Y no lo es porque es el comunismo que se disfraza de democracia. Lo llaman progresismo.

El castrochavismo es la atrocidad totalitaria a la que se enfrentan los venezolanos. El centro de operaciones está en Cuba, isla que vive esclavizada desde el 1 de enero de 1959. Castro argumentaba que “a la tonta democracia se la destruye desde dentro”.

En febrero de 2024 Nicolás Maduro ya proclamaba que ganarían las elecciones fuera como fuera. Hasta inhabilitó a María Corina Machado, líder de la oposición, porque había ganado las primarias brillantemente. Pero dio en hueso. Ella, que en el Congreso de Venezuela le dijo a Hugo Chávez que “expropiar es robar”, no se amedrentó. Edmundo González Urrutia, diplomático, escritor y profesor, paso a ser el candidato opositor al chavismo a la presidencia de Venezuela 2024. Durante la campaña electoral el tirano Maduro no dudó en amenazar con un baño de sangre si no ganaban las elecciones. En su infame campaña ha contado con la presencia y apoyo del príncipe de Delcy Rodríguez, expresidente del gobierno de España. También con el reconvertido bailarín y coartífice del partido morado, señor Billetero. Tiene despacho en el Palacio de Miraflores, con baño donde refrescarse después de sus hazañas.

El 28 de julio los venezolanos acudieron masivamente a votar. Los que sobreviven en Venezuela y los 8 millones de exiliados. La dictadura ha hecho todo tipo de tropelías para evitar que voten. La voluntad de libertad y justicia de los venezolanos quedó plasmada en los resultados.

El castrochavismo pasó inmediatamente a robarse las elecciones a sangre y fuego. Salvaje dictadura de perversos revolucionarios. ¿Qué hace la comunidad internacional? No hay escondite.

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