Ajustar los gastos

Doña María del Mar Vázquez, alcaldesa de la ciudad de Almería, nos proclamaba el año pasado algo con lo que todos los ciudadanos estamos de acuerdo: “hay que ajustar gastos para no subir impuestos”. Perfecto, María, estoy con usted, me ha convencido. Te queremos, María. ¡Guapa guapa guapa! Veo que se toma en serio lo de subir los impuestos a los vecinos de su municipio, y que para ello está por la labor de ajustar los gastos públicos de su corporación. Cuestión esta que no parece esté en el frontispicio de los políticos que nos gobiernan. Por fin puedo decir una cosa buena de la alcaldesa almeriense: Va a ajustar la política de gasto de su ayuntamiento, decía el pasado año.

Pero, nos surge la consabida duda de siempre ante los representantes de las administraciones, que una cosa es lo que dicen de cara a la galería, y otra cosa lo que hacen después en esas reuniones donde toman las decisiones que afectan a nuestros bolsillos. Yo quiero creer a María, y no dudo de que tenga buenas intenciones, pero los actos desmientes las mismas. La alcaldesa nos hablaba de ajuste de gastos para no subir impuestos cuando había subido el Ibi, el agua y camino llevaba el de las basuras. Es de imaginar que lo del ajuste lo llevará a cabo a partir de hoy, dos de enero del 25. ¿O no?

Lo que nos lleva a pensar que, si la alcaldesa no logra el afamado ajuste mencionado este año nuevo, María se verá en el obligación de volver a subir el primer impuesto que le vengan a mano, o la tasa o precio que pase por la puerta del ayuntamiento. No se entiende de otra manera que nos venda que hay que ajustar el gasto para no subir impuestos, si este no se lleva a buen puerto. Justo es reconocer que quedaban muy bien las declaraciones ante los medios, con la fuerza que ponía en sus aseveraciones sobre el ajuste del gasto, pero rascas un poco, y te pasa como con el famoso de la Once, que casi nunca encuentras el premio, y que lo único que consigues es ir perdiendo un euro tras otro.

María no reparte premios como la Once, lo único que podemos esperar de ella es que no nos suba más los impuestos, y lo prometía con un ajuste del gasto, pero lo hizo después de una subida importante: la del Ibi. Es de esperar que este 25 sea el del ajuste, no creo que nos los vaya a bajar, pero que tampoco nos suba alguno más. María, ¿podemos esperar que no nos subas impuestos en este año? Díganos algo, señora alcaldesa.