Ahora viene lo bueno

Las viñetas de Moreno son editoriales gráficas. En la del martes pasado, recuerden, un grupo de ejecutivos (y ejecutivas) toman copas en la madrileña feria de las frutas y hortalizas Fruit Attraction, y por el fondo aparece un camarero, bandeja en ristre, anunciando sonriente: “Aquí llega el jamón”. Cual si de una magdalena proustiana se tratara, la escena me trajo a la memoria algunas ocurridas en las Jornadas Agrogastronómicas que se celebraron en Roquetas entre 2000 y 2009. Como su propio nombre indica, se trataba de ofrecer menús basados en la amplia variedad de frutas y verduras que produce nuestro campo. Cada año participaban entre cinco y siete restaurantes del municipio, a los que les pedíamos que presentaran menús de varios pases, con protagonismo absoluto de los productos estrella de la zona. La mayoría hacía dos entrantes con bastantes productos agrícolas, casi siempre con algún “adorno” de mariscos, embutidos y similares, dos platos fuertes –pescado y carne- con guarnición de verduras y postre. La escena más parecida a la imaginada por Moreno ocurrió en el amplio comedor del Club de Golf de Roquetas. Estábamos a mitad del menú y, cuando pasaron los dos entrantes, uno de los miembros del jurado (profesional destacado del gremio) se dirigió sonriente al resto de la mesa y nos dijo: “Ahora empieza lo bueno”. La verdad es que no era –ni es- un caso excepcional. Otra anécdota de las mismas Jornadas me ocurrió cuando fui a visitar a uno de los restaurantes que queríamos incluir en el programa de ese año. Era un conocido restaurante italiano, que me dijo, muy extrañado, cuando le conté el objeto de mi visita: ¿menús con verduras? Pero si aquí las usamos mucho y nos las devuelven casi intactas en los platos. Tenía razón. Lo malo es que han pasado quince años, nuestro sector agrícola produce excelencias y en gran variedad, pero el personal se sigue dejando las verduras en el plato. Hasta los políticos se lanzan a defender la carne y olvidan el verde. El presidente llegó a decir que “un chuletón al punto es imbatible”. Por cierto, el chuletón está mejor poco hecho, pero esa es otra cuestión. ¿Para cuándo un restaurante almeriense especializado en verduras? No me refiero a vegano, en absoluto. ¿Tendría éxito aquí uno como el Casa José de Aranjuez o El 33 de Ricardo Gil en Tudela y Madrid? Con un poco de jamón, esos sí.