
OPINIÓN | Luces y Razones
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REGOMELLO define muy certeramente el resquemor, la desazón o el desasosiego cuando tienen que ver con cosas cotidianas, de cada día. Sientes regomello por no haber estado a la altura y haber quedado mal, y supone en quien lo tiene un pudor y una cierta finura de sentimientos que son los que de verdad están en peligro de extinción. El "regomello" obligaba a dar algún tipo de explicación posterior a la otra persona para recuperar el buen clima que se suponía dañado. Ambas definiciones obtenidas en Padrinos de la palabra Regomello, no recogida en el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, pero sí en el María Moliner, define con cierta rabia, con profusión de detalles y hasta con socarronería, lo que les está ocurriendo a los negociadores de pactos políticos en la provincia, que afectan como ustedes imagino que conocen, a 16 pueblos con el mayor número de habitantes de la provincia.
Este regomello, este come-come, no deja dormir a unos pocos y ha quitado el sueño a otros tantos, que ven un futuro cercano incierto, en el que las salidas son complejas y con demasiados obstáculos como para sortearlos y se ven en la necesidad de recuperar el buen clima que había y que, por mor de "quítame tu esas pajas", en realidad vigas de acueducto, se había dañado durante la campaña electoral. Porque no me dirán ustedes que no sorprende la suavidad, la educación y hasta el cariño que todos, sin excepción, todos profesan a Ciudadanos y a su lider en Almería, Miguel Cazorla, cuando hace dos semanas nombrarlo era como invocar al mismísimo demonio. Y como lo escrito siempre permanece, sólo hay que echar un vistazo a las redes sociales para comprobar como aquellos que más tienen que perder, generalmente mandados y algún que otro "corre, ve y dile", escribían sin cesar al dictado, gracieta tras gracieta e sinsulto tras insulto, sin importar más allá del agrado al jefe, en la creencia que de esta manera se asegura un puesto de asesor o concejal de por vida. Cuan equivocados estaban. En política se perdona pero no se olvida. De ahí que Miguel Cazorla, por poner un ejemplo, o los concejales electos de la Plataforma de Vecinos de Adra, hayan marcado las líneas rojas que no se pueden cruzar en una negociación, en la que disfrutan, se carcajean y hasta sienten placer, mientras otros no cesan en su regomello permanente, que se prolongará, al menos, hasta el día 13 de junio, fecha de constitución de los ayuntamientos. Aunque me temo, que el tiempo de purgatorio se puede alargar hasta las elecciones generales. Varios meses de condena, que a más de uno lo van a poner almodovarizado, o lo que es lo mismo, al borde de un ataque de nervios. Y es que aquellos que tienen en su mano la llave del poder o del gobierno están llevando hasta sus últimas consecuencias aquel viejo dicho Apache que asevera: "cuando todo el mundo corra y tenga prisa tú, se lento".
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