Roberto Scholtes
¿Podrán las bolsas europeas batir a EEUU en 2025?
Puerta a puerta
El pasado miércoles, el delantero uruguayo Darwin Núñez pisó suelo almeriense por primera vez cerca de las 14:00 horas. Después de un extenso viaje desde el país charrúa, el atacante de 20 años salía del aeropuerto de la ciudad indálica acompañado de su representante y con el inseparable mate en sus manos, mientras Darío Drudi le esperaba a su llegada. Una contratación que puede convertirse en la más cara en la historia de la entidad rojiblanca, superando la del extremo argentino Pablo Piatti una década atrás. Un honor que podría perder el de La Carlota de cumplirse las diversas cláusulas presentes en la incorporación del charrúa. Un fichaje que en cierto modo recuerda al del tailandés Teerasil Dangda, por lo mediático que fue en su fecha, siendo múltiples los seguidores de esta región que comenzaron a seguir a la escuadra almeriense, cuyos perfiles sociales llegaron a estar copados por las respuestas de ciudadanos tailandeses. Imposible olvidar aquella pretemporada que los pupilos de Francisco Javier Rodríguez Vílchez realizaron en tierras asiáticas. El aterrizaje de Darwin Núñez, quien en Uruguay lo consideran el nuevo Cavani, ha desatado un gran revuelo en aquel territorio de América del Sur, en la que es la primera experiencia en el extranjero del delantero natural de Artigas. Un futbolista que asegura que lo que hará con su primer sueldo será comprarle una vivienda a sus progenitores, como muestra de su infancia vivida en una región muy humilde. Las cifras de la operación pueden suponer una gran presión para este atacante, si bien es innegable que hasta la fecha es solo una simple promesa, siendo el tiempo el que marque si Darwin Núñez explotará en el fútbol europeo y cumplirá las expectativas procedentes de Uruguay, un país del que han salido futbolistas mundialmente conocidos después de cruzar el charco.
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