Estafadores engominados

Esta es la realidad que estamos viviendo. Alcaldes y alcaldesas pueden, con ánimo de lucro personal, utilizar el engaño para provocar el error entre personas de su entorno, de su comunidad, haciendo que éstos actúen en su propio perjuicio y el de su comunidad. Nadie en su sano juicio le daría el voto a una alcaldesa o alcalde a sabiendas de que antes de que finalice su primer año en el ejercicio de sus funciones, le suba el agua, la basura, el IBI o las tasas por servicios básicos. Y, además, subirse él o ella su sueldo y el de todos sus nuevos concejales y asesores. Muchos asesores. Bien. Ahora nos vamos al Código Penal y leemos: Cometen estafa los que, con ánimo de lucro, utilizaren engaño bastante para producir error en otro, induciéndolo a realizar un acto de disposición en perjuicio propio o ajeno. En Níjar, Almería y en mil y un lugares más, el PP ha hecho exactamente lo mismo. Han vendido un programa de gobierno en el que, como partido supuestamente ungido con la sabiduría de la economía divina, iban a bajar los impuestos, llenar los solares de industrias y, más o menos, repartir jamones por las calles, mano a mano con Vox. Un año después, en Níjar, Almería y en mil y un lugares más, el recibo del agua se multiplica. Quieren subir el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el de la basura y hasta las tasas por el uso de instalaciones municipales o la participación en las escuelas deportivas. Antes de las elecciones, esto iba a ser una especie de paraíso fiscal donde nadie pagaría impuestos. Mentira. Y en todo este lío, la Andalucía del PP, esa que prometía industrias en cada rincón, fábricas de coches y naves espaciales en tal volumen que iban a faltar solares, se limita a saltar cuando Ayuso, desde Madrid, les dice que salten y a llorar cuando les dicen que lloren. Andalucía es la comunidad que más dinero recibió en 2024 del fondo de Garantía, Suficiencia, Cooperación y Competitividad. Somos la tercera comunidad que más dinero recibe en inversión y, aun así, estos del PP nos fríen a subidas de impuestos municipales.

¿Se puede saber en qué se gastan el dinero? En Níjar les dejamos la caja llena, con un remanente de tesorería histórico. ¿Me pueden explicar cómo, aun así, pueden subir los impuestos? ¿Acaso se saltaron las clases de fiscalidad? El problema puede ser, también, que sencillamente no fueron a ninguna. Pero sigamos pendientes de Madrid y Cataluña mientras nos cargan los recibos de agua, IBI y basura en las cuentas corrientes, que así es como mejor solucionamos lo nuestro, haciendo de “pagafantas” de los otros. Esa es la Andalucía de los engominados del PP.