El arquitecto obcecado

Almería, 24 de abril de 2025. Estimado Piñeiro, Rubi se ganó a pulso el sobrenombre del ‘arquitecto de Vilassar’ porque supo diseñar un equipo de autor que logró (no sin sufrimiento) el tercer ascenso en la historia de la entidad y también una agónica permanencia. Ambas cosas pesaron mucho para que el club le confiase la reconstrucción, pero durante este año extraño para todos en el que la entidad apostó por mantener un vestuario que resultó fallido en la máxima categoría en la creencia de que se pasearía por los campos de Segunda, empieza a cobrar fuerza el mote de ‘obcecado’. Según la RAE hace alusión a la persona que ha perdido la claridad mental, especialmente debido a una obstinación en algo. Rubi lleva mucho tiempo obstinado en alinear a un pelotón de atacantes sin sacrificio defensivo y esa rémora está arrastrándola el equipo con funestas consecuencias. Todavía está a tiempo de rectificar, pero ahí radica la gran duda, si será capaz de tragarse el orgullo y volver al equilibrio que él mismo ya consiguió, por lo que conoce el camino. Confío en su batuta.