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LA Correspondencia
Londres, 15 de septiembre de 2022. Estimado Navarro, no creo que Ambrosio Sánchez necesite carta de presentación en nuestra ciudad. Hemos tenido la suerte de ser sus compañeros de redacción en nuestros inicios, como también somos compañeros y amigos de su hijo Tito. Ambrosio estuvo décadas dando espacio en los medios a los deportes minoritarios y de base. Como toda su familia, lleva el baloncesto en la sangre, pero su compromiso con el deporte va mucho más allá del deporte de la canasta y su entrega y pasión ha servido para difundir las disciplinas y competiciones más desconocidas. Eso parecería motivo suficiente para que lo quieran por toda la provincia, coleccionando placas y reconocimientos suficientes para llenar un museo. Pero si Ambrosio Sánchez es tan grande como para merecer más que nadie el Escudo de Oro que le impuso ayer la Diputación de Almería es porque, por encima de todo, es una gran persona, que se hace querer por su cercanía, honestidad y bondad. Ojalá haber podido estar ayer allí con vosotros. ¡Enhorabuena Ambrosio!
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