El teatro clásico se acerca a los niños con la obra ‘La vida es cuento’ representada en la EMMA

La Oficina acogió la pieza escénica ‘La Donna Inmobile’ dentro de las Jornadas Off

Escena de la obra ‘La vida es cuento’. / D.A.
D.M.

06 de abril 2019 - 18:31

La Escuela Municipal de Música y Artes de Almería, en su salón de actos, recibió ayer una nueva propuesta de las XXXVI Jornadas de Teatro del Siglo de Oro que organizan de manera conjunta el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería, el Ayuntamiento de Roquetas de Mar, Diputación Provincial y la Universidad de Almería.

Concretamente, los protagonistas fueron los niños y niñas que, acompañados de los mayores, disfrutaron de una divertida revisión de La vida es sueño, de Pedro Calderón de la Barca, a cargo de las compañías Jóvenes Clásicos y TantonTería, titulada La vida es cuento. Una conjugación de teatro de títeres, el de objetos, títeres corporales y teatro de sombras.

El punto de partida es el de Sofía, que está castigada en su habitación cuando de repente se va la luz en todo el barrio. Le da mucho miedo la oscuridad y por eso llama asustada a su padre, pero quien aparece es el rey Basilio, que la conducirá hasta el mundo onírico que relató Calderón de la Barca. Allí conocerá a Segismundo y aprenderá que con mal comportamiento no se llega muy lejos pero que haciendo las cosas bien la vida puede ser completamente diferente.

También la vanguardia tuvo su hueco en las XXXVI Jornadas de Teatro del Siglo de Oro con las Jornadas Off, un teatro alternativo y atrevido. El escenario fue la asociación cultural La Oficina, donde el jueves se representó La Donna Inmobile, bajo un subtítulo que expresa el sentido de la obra: Dormirse virgen y despertar madre de gemelos. Una realista pieza escénica en la que se aborda la problemática de las violaciones sexuales. Un cuento visceral y onírico que estimular la mente y el alma del espectador, una denuncia que hace reflexionar al espectador.

Los protagonistas son Rebeca Matellán, Trico Gómez y Rakel Camacho, que trasforman la candidez de ‘La belleza durmiente’ por la crudeza de las mujeres que son violadas.

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