Paco Plaza comparte las claves de sus comienzos en el encuentro ‘Cómo hice mi primer largo’

El Teatro Cervantes se llenó con alrededor de doscientos estudiantes relacionados con la imagen y el sonido de distintos centros educativos de la capital y también de la Escuela de Arte que conocieron de primera mano los inicios en la profesión del director Paco Plaza, que fue el protagonista en esta nueva edición del Festival Internacional de Cine de Almería de la actividad ‘Cómo hice mi primer largo’.

El cineasta valenciano suma así su nombre a una impresionante lista de directores y profesionales de relevante trayectoria como Achero Mañas, Salvador Calvo, Juanma Bajo Ulloa, Ramón Salazar, Fernando León de Aranoa, Montxo Armendáriz o Gracia Querejeta. Una iniciativa que se consolida un año más como una de las actividades paralelas más inspiradoras y enriquecedoras para los jóvenes profesionales del futuro. Concretamente, los distintos grupos asistentes a la actividad pertenecían a los centros educativos del Alhamilla, Azcona, Alborán, Albaida, Alhadra y Escuela de Arte Carlos Pérez Siquier.

Paco Plaza es uno de los directores que ha conseguido modernizar el cine de terror de nuestro país, consiguiendo a la vez grandes éxitos de taquilla. Este director valenciano ha logrado transformar un género que durante estos años se ha convertido en locomotora de nuestro cine.

Su primer largometraje fue El segundo nombre, un thriller donde ya se apuntaban las señas de identidad de su obra. Tras Romasanta, la caza de la bestia, dirige junto a Jaume Balagueró REC, uno de los mayores éxitos del género, que tendría dos secuelas y una adaptación norteamericana. Otros títulos relevantes de su filmografía son Verónica, Quien a hierro mata, La abuela y Hermanamuerte.

En El segundo nombre, Plaza adapta la novela de terror de Ramsey Campbell, donde no se juega con lo paranormal. Fue protagonizada por Erica Prior, Trae Houlihan, Craig Hill, Teresa Gimpera y Denis Rafter. Desde su estreno en el festival de Sitges se convirtió en un título de culto, que este año se ha recuperado para FICAL en una actividad que siempre es bienvenida por el alumnado. Tras ver la película pudieron trasladarle sus dudas e inquietudes.

Paco Plaza comenzó rememorando cómo empezó con sus primeros cortos precisamente en edad de instituto, a los 15 o 16 años y confesó con honestidad que “llevo veinte años sin ver la película y os reconozco que no la recuerdo hoy como especialmente buena, pero sí que le doy su valor y le tengo todo el cariño porque lo importante es que me permitió conocer a una gente con la que veinte años después sigo trabajando, como mi familia alternativa y también por todo lo que me supuso para entender cosas del oficio”.

Una oportunidad que, curiosamente, le llegó a través de la exhibición de su corto Abuelitos, que también se proyectó en el Festival Nacional Almería Tierra de Cine, paso previo al nacimiento de FICAL. “Se me acercó un productor y me encargó hacer la película de la novela que le había fascinado”.

El director valenciano compartió que “verla por primera vez y, más allá, que público al que no conoces de nada pague una entrada y gaste una hora y media o dos horas de su vida en hacer algo que tú has hecho es una gran responsabilidad que hoy siento todavía más”.

Preguntado por sus influencias, entre los escritores citó a Stephen King y entre los directores se detuvo sobre todo en Luis Buñuel y Roman Polanski. “Me gusta mucho la interacción entre los actores y la cámara. En el cine es tan importante lo que muestras como lo que no muestras en cámara y supone la esencia del cine, dirigir la mirada del espectador a los elementos básicos con los menores recursos posibles”.