Karra Elejalde: "Me gusta interpretar las andanzas de pequeños quijotes”

Karra Elejalde ya es uno de los nuestros. Su estrella luce con luz propia en el Paseo de la Fama de Almería y anoche recibió el Premio Almería Tierra de Cine en la Gala de Clausura de FICAL. Y lo hizo como afronta sus papeles, entregándose con autenticidad y agradecimiento a Almería, al Festival y al público que le aplaudió y se realizó fotografías con el protagonista.

De esta manera, FICAL puso el foco en un actor de raza, con incursiones en el guión y dirección, reconocible por su amplia trayectoria, que define como “andanzas” y que camina de papel en papel como Alonso Quijano, el célebre personaje de la literatura de Cervantes. “El único papel que me ha faltado es Don Quijote, siempre me ha parecido un reto y me hubiera gustado interpretarlo. Se me ha pasado la edad de hacerlo, pero me he resarcido haciendo pequeños quijotes o chalados con demencias similares”, reflexiona.

Y es que una de las características de Karra Elejalde es su capacidad camaleónica para transformarse en diferentes perfiles. “Si sólo haces comedia, pues te restringes el trabajo, y no me gusta repetirme, prefiero pasar al siguiente personaje. No quiero encasillarme. Por ejemplo en ‘Ocho apellidos vascos’ acepté la segunda parte, pero descarté una posible tercera secuela”.

Karra Elejalde fue presentado por el director de FICAL, Enrique Iznaola, afirmando que “es uno de los grandes actores de nuestro cine, actor versátil, que es capaz de provocarnos la risas en ‘Ocho apellidos vascos’ y conmovernos en ‘Mientras dure la guerra’”, en un viaje por Almería en el que estuvo acompañado por el presidente de Diputación, Javier A. García, la alcaldesa de la ciudad, María del Mar Vázquez, y el secretario general de Cultura de la Junta de Andalucía, José Vélez, así como la diputada de Cultura, Cine e Identidad Almeriense, Almudena Morales, y el concejal de Cultura, Tradiciones y Fiestas Mayores, Diego Cruz. Un recorrido que concluía anoche en la Gala de Clausura del Festival con la entrega del Premio Almería, Tierra de Cine.

Uno de sus grandes éxitos de taquilla hasta que llegó ‘Ocho apellidos vascos’ fue ‘Año Mariano’ rodada en Almería en 1999 y estrenada en el año 2000. “La experiencia en Almería fue muy buena. Fernando Guillén Cuervo y yo queríamos darle un aire de western a la película y el lugar ideal era Almería. Las productoras preferían rodar cerca de Madrid, para ahorrar el gasto de desplazar a un equipo de 70-90 personas, pero un técnico de cámara que había trabajado con los grandes del western nos recomendó los paisajes de Almería, y logramos ese aire”.

‘Año Mariano’ está dirigida, escrita y forman parte del reparto tanto Fernando Guillén Cuervo como Karra Elejalde, y en la producción se visualizan paisajes espectaculares del parque natural Cabo de Gata-Níjar, como Cala Carbón o Los Escullos. “Fuimos muy disciplinados para respetar el paisaje, y tengo un buen recuerdo. Además, producida por Karlos Arguiñano, al igual que Airbag, costó 174 millones de pesetas y recaudamos más de 900 millones. Fue un éxito de taquilla”.

Al hilo de esta idea, el actor reconoce que “hoy en día no saldrían guiones con un humor tan irreverente como Airbag y Año Mariano. No nos dejarían hacer estas dos películas, pero por propia autocensura de las productoras. Quien manda hoy en día son las plataformas digitales y hacen un filtro tan grande que somos los guionistas los que nos autocensuramos. El que juegue a hacer aquel humor, tiene todas las de perder”.

Karra Elejalde se ha apropiado de la frase de la actriz Sara Sarandon, quien manifestó que “yo me leo el guión y si quito mi personaje y la película sigue funcionando, no la hago. Y yo lo he llevado a rajatabla. He sido valiente, si solo haces comedia, solo trabajas la mitad. Si te mueves en más registros, tienes más proyectos”.

Su mayor éxito ha sido ‘Ocho apellidos vascos’, que, como confiesa, saltó todas las previsiones. “Ninguno esperaba esta reacción del público. Pensábamos en hacer una comedia digna, pero nada más. Piensa que en los rodajes la gente es muy profesional, y aunque haya humor nadie se ríe. Pero en esa película deberíamos haber detectado que el equipo se reía. Yo creo que la clave es que se dio libertad interpretativa”. Pero, Karra es, por encima de todo, un profesional que ama el cine, no la fama, y el éxito desmesurado le desconcertó. “Me ha costado a nivel personal. He pasado momentos de angustia. Antes me sentaba en las terrazas y ahora lo hago dentro. No pensaba que tan mayorcete podía pasarme algo así”.

Su incursión en el cine no procede de la escuela, es el un actor de tripas, que fundó un grupo de teatro y a partir de ahí ha ido interpretando las andanzas de ‘pequeños quijotes’, y que desde hoy es un convencido de la ciudad de Almería en el firmamento de estrellas del Paseo de la Fama y anoche se sumó al elenco de profesionales de la industria audiovisual que son homenajeados en el Festival de Cine. .