Warhammer 40.000 Space Marine 2 se erige como la necesaria vuelta a los orígenes de la acción

Los calificativos son casi infinitos a la hora de describir cómo ha sido la experiencia al ver los créditos bailar en pantalla tras acabar Warhammer 40.000 Space Marine 2. Visceral, adictivo, grotesco, apabullante, honesto o gigantesco podrían ser algunos de ellos.  

Y es que había tantas ganas de disfrutar de la secuela de un título que marcó a muchos por su endiablada acción hace ya la friolera de trece años que volver a ponerse en la piel del capitán Titus ha sido una experiencia gratamente satisfactoria. Y lo es, entre otras muchas razones, porque el título apuesta por continuar con la senda que tomó el primero en el que la acción entendida como vehículo sobre el que pivotar todas las mecánicas primaba por encima de todo. Una apuesta, que por otro lado, rescata así casi del olvido una fórmula que rezuma nostalgia y a la vez frescura frente un sector tan aficionado a los juegos como servicio y a los mundos abiertos carentes de personalidad.

Space Marine 2 elimina todas esa impurezas de un par de disparos de Bolter Pesado y nos pone de nuevo en la piel de Titus, el capitán de los Ultramarines, que se enfrentó con los orcos en el mundo Forja Graia en el primer juego. Sin embargo, su final no terminó siendo el deseado. Nada lo es en este mundo caótico. Su victoria se vio empañada por las acusaciones de herejía de sus propios compañeros de escuadrón. Y aquí, en la continuación, esas acusaciones conllevan que sea degradado a teniente y tenga una nueva encomienda tras dos siglos al servicio de la Guardia de la Muerte: comandar un escuadrón de Ultramarines para enfrentarse a la invasión tiránida de un sistema solar imperial.

Toda la carne en el asador

Ese es el hilo conductor de una aventura que superará holgadamente la decena de horas (yo he tardado unas quince en completar el modo historia) y que pone toda la carne en el asador desde el primer momento con unos combates contra centenares (y no exagero) de tiránidos que te harán sentirte, por momentos, una máquina de aniquilación definitiva.

Esta capacidad de llenar la pantalla de enemigos, que mejora las mecánicas del juegos, es viable gracias a lo que Saber llama tecnología de enjambre que comenzó en unos de los juegos anteriores del estudio World War Z y que desempeña un papel clave en la representación de los enjambres tiránidos unidos por la colmena en Space Marine 2.

De nuevo, con su tradicional vista en tercera persona, y acompañado por otros dos Ultramarines, nos veremos envueltos en una serie de acontecimientos por las dudas y sospechas sobre Titus que hacen avanzar la trama mientras hacemos lo propio en el campo de batalla a martillazos, con la mítica espada sierra o un variado y extenso elenco de armas. En Space Marine 2 podremos llevar tres armas: una principal, una secundaria y un arma cuerpo a cuerpo. Esto varía frente al primer juego en el que podíamos, si queríamos, llevar tres armas primarias. 

Space Marine 2 sí que mantiene del original la mezcla entre combate cuerpo a cuerpo y disparos a distancia, así como sus espectaculares ejecuciones a enemigos de gran tamaño. Pero en esta segunda parte, ante la cantidad demencial de enemigos en pantalla, tendremos que estar más pendientes del control de masas y en contrarrestar los ataques enemigos. Para ello, tendremos como novedad el golpe con pistola que permite a los jugadores realizar una parada o una esquiva perfecta con un disparo autodirigido de su arma secundaria además de las esquivas ante ataques que no se pueden bloquear y los propios bloqueos como tal.

Solo o acompañado, tú decides

Otra de las novedades es que la campaña puede disfrutarse solo o con otros dos jugadores que desempeñan el papel de Gadriel y Chairon, los Ultramarines que nos acompañan. Además, existe un modo cooperativo independiente llamado Operaciones en el que podemos escoger entre varias clases de Ultramarines, cada una con diferentes habilidades y especializaciones, para hacer frente a una serie de misiones similares en formato a las de la campaña, pero que ofrecen una mayor imprevisibilidad. Más gasolina a la fórmula.

Y hablando de sorpresas, el acabado visual del título te dejará literalmente en fuera de juego. Saber Interactive ha conseguido rescatar la esencia del original con un despliegue tecnológico que directamente coloca a este Space Marine 2 entre los títulos más punteros de este año junto a Hellblade 2 y Black Myth: Wukong. Su fidelidad visual y sus físicas rozan la excelencia junto a unas texturas de alta resolución y un mimo por el detalle en el que las ejecuciones y explosiones alcanzan el cenit.

Hemos disfrutado de esta aventura en su versión para PC (ha salido también para PS5 y Xbox Series) con un ordenador que monta un Ryzen 7 5700X3D, una RTX 4070Ti y 32GB de ram y la experiencia con todos los detalles al máximo ha sido de notable alto. El juego corría fluido por encima de los 80-90 imáganes por segundo todo el rato y solo ha tenido alguna ralentización esporádica en momentos de mucha acción y un par de salidas al escritorio. Lo hemos probado a una resolución de 2560x1440 ya que no soporta de momento el formato ultrapanorámico. Un añadido que llegará a finales de este mes en un parche de actualización que, según Saber Interactive, también corregirá muchos errores y problemas en el rendimiento.

Conclusiones

Súmale una banda sonora con tintes épicos y un doblaje completo al castellano para redondear una propuesta que supone un soplo de aire fresco en el sector en el que la diversión sin aditivos se impone al relleno sin sentido. La continuación de la historia del capitán Titus es una epopeya que nadie debería perderse porque no te deja indiferente tanto por lo que muestra en pantalla, con un apartado visual de nueva generación, como por lo que narra con una serie de acontecimientos que te mantendrán enganchado en todo momento hasta el desenlace final. Un claro ejemplo de que menos es más y que apostar por fórmulas más directas con mecánicas menos complejas que casan a la perfección es siempre sinónimo de caballo ganador.

Y este Space Marine 2, que podría definirse como una mezcla de las sagas Gears of Wars y Doom, es un digno heredero de esa corriente. Sin duda, el mercado necesita más juegos como este que nos teletransportan a nuestros inicios en este hobby y que solo tienen una premisa: la diversión. ¡Por el emperador, Ultramarines!

Hemos podido analizar Warhammer 40.000 Space Marine 2 en Steam (PC) gracias a una clave digital que nos ha enviado Plaion España.