Adiós a Patrick Demarchelier, el reconocido fotógrafo de moda y el favorito de Lady Di

Dicen que inmortalizó el espítu de Lady Di en aquella foto suya para la revista Vogue. El famoso fotógrafo de moda francés, Patrick Demarchelier, falleció el jueves a los 78 años, según ha anunciado su familia a través de su propia cuenta de Instagram. "Es con gran tristeza que anunciamos la muerte de Patrick Demarchelier el 31 de marzo de 2022, a la edad de 78 años. Deja atrás a su esposa Mia, sus tres hijos Gustaf, Arthur, Victor y tres nietos", dice el texto con el que se ha hecho pública la noticia.

Demarchelier era uno de los fotógrafos de moda y de realeza más famosos del planeta. Además de ser el autor del retrato más conocido de Diana de Gales, sus fotos de Madonna, Kate Moss y Angelina Jolie, y sus portadas para discos de Elton John y Celine Dion dieron la vuelta al mundo. Numerosas celebridades, entre ellas las modelos Cindy Crawford, Gigi Hadid y Amber Valetta, han respondido a este post mostrando sus condolencias a su familia y alabando la figura del fotógrafo.

Naomi Campbell, Crawford, Scarlett Johansson, Robert De Niro y Jennifer Lawrence, entre muchos otros, se suman a la interminable lista de modelos y actores inmortalizados por Demarchelier.

Pero, sin duda, la más famosa fue la princesa Diana, a quien inmortalizó para la edición británica de Vogue, un famoso retrato que no pudo faltar en la exposición Vogue 100: A Century of Style que albergó la National Portrait Gallery en 2016.

El francés trabajó para revistas como Harper's Bazaar y firmas de renombre como Chanel, y llegó a hacer un cameo en la película de Sexo en Nueva York. En 2018, The Boston Globe publicó una investigación en la que era acusado por varias mujeres de haberlas acosado sexualmente.

Una carrera imparable

Nacido en Le Havre, Demarchelier se formó de manera autodidacta: "No pensé en hacer carrera. No lo planifiqué. Vino a mí", dijo en una entrevista en 2015. Su padrastro le regaló su primera cámara cuando era adolescencia y enseguida le dio buen uso haciendo retratos en bodas y fotos de pasaporte. A los 20 años, se trasladó a París, donde acabó encontrando trabajo con Hans Feurer, fotógrafo suizo que colaboraba habitualmente con Vogue.

Ya estaba haciendo fotos para la edición estadounidense de Vogue Estados cuando se mudó a Nueva York, siguiendo a una novia, en 1975. Firmó su primera portada en 1977, pero quizá la más memorable de todas fue la de mayo de 1989, con Madonna como protagonista. Aquel fue un gran año para el fotógrafo: además de que su obra apareció recogida en la edición inaugural de la colección American Photographer Master Series, se convirtió en el retratista personal de la princesa Diana de Gales, que había descubierto su trabajo en una portada de Vogue. El francés fue el primer no británico en convertirse en fotógrafo oficial de la familia real.

Sus reportajes de los años 90, soleados y luminosos, mostraban a modelos alegres y siempre activas y cercanas pese a sus elegantes estilismos. Si en Surf's Up Cindy Crawford posaba junto a un grupo de fornidos surfistas, en Summer's Bare Necessities, en 1992, se veía zarpar en un yate a Naomi Campbell, Beverley Peele y Tyra Banks.

En 2011 publicó un libro titulado Dior Couture. "Los fotógrafos tienen que hacer que la ropa luzca de fábula, para eso nos pagan; y yo tengo una mirada en positivo", manifestó en una entrevista en 2012.

Entre los mensajes de agradecimiento y condolencias a la familia, destaca el de Amber Valletta, quien ha resaltado que fue uno de los primeros fotógrafos con los que trabajó: "Es historia de la moda y una leyenda de la fotografía. Le echaremos de menos".