La sandía, un 200% más cara en el supermercado que en el campo
Índice de precios
La competencia desleal y la entrada de 'terceros países' agravan la situación de la sandía el tomate que aumentan la distancia entre lo que recibe el productor y lo que paga el consumidor
Los productores cada vez obtienen menor beneficio, lo que hace que el cultivo sea cada vez menos rentable
La sandía almeriense, a punto de caramelo
La inflación de los precios y el coste de la vida continúa en aumento un mes más, dónde los principales afectados son los consumidores. En el otro lado de la cadena, los productores son también los grandes afectados que ven como los lineales de los supermercados venden sus productos con un precio mucho más elevado del que ellos reciben por cultivarlo.
Mientras los consumidores pagan precios cada vez más altos, los agricultores continúan luchando contra un sistema de intermediarios que encarecen el producto final. De esta manera, durante el pasado mes de abril los productos agrícolas multiplicaron su precio por 4,28 en el trayecto del campo a la mesa según el Índice de Precios en Origen y Destino de los alimentos (Ipod) de mayo.
En el caso de la sandía, una de las frutas por excelencia del campo almeriense durante la temporada de primavera y verano, según el informe de Coag, esta ha experimentado una subida en destino del 205%, siendo el precio para el agricultor de 0,55 euros/kilo frente a los 1,68 euros que ha pagado el consumidor como precio final del producto. A pesar de estar siendo una buena campaña para el agricultor, no es éste quien obtiene los mayores beneficios que deja el producto.
En el caso del tomate, el rey de la huerta almeriense, un kilogramo de tomates para ensalada que el agricultor vende por 0,29 euros, puede llegar a costar hasta 2.20 euros en el supermercado. Esto supone un aumento porcentual del 659%, lo que indica que el tomate ha multiplicado hasta 7,59 veces el precio de origen hasta que llega al consumidor.
Tanto el tomate como la sandía son pilares fundamentales de la producción agrícola en la provincia de Almería, y lo que da de comer en la temporada de primavera- verano a la mayor parte de los almerienses que viven del sector agrícola, sustentando su economía.
Igual ocurre con muchos otros productos agrícolas básicos en la provincia en los que la brecha también se acentúa como por ejemplo en el caso del pepino que experimenta un aumento del 390% y el pimiento que ronda una subida aproximada del 200%.
Esta brecha de precios pone en riesgo cada vez más la agricultura almeriense ya que muchos productores se ven obligados a abandonar sus cultivos debido a la falta de rentabilidad en sus campañas. Por ello, las protestas de los agricultores en busca de precios más justos han sido frecuentes en los últimos tiempos en un intento por vender su producto de forma más rentable.
La entrada de productos de ‘terceros países’ es una de las grandes problemáticas que afectan a los agricultores, ya que debido a la ley de oferta y demanda, el volumen de producto hace que caigan cada vez más los precios para el agricultor.
Por otro lado, los cítricos lideran el ranking de encarecimiento, siendo el limón el producto con la mayor subida desde hace meses, con un aumento del 759%. Esto se traduce en una multiplicación de casi diez veces su precio original.
A la cola en esta subida está el aceite de oliva, que solo se incrementa un 31% respecto al precio en origen , llegando a alcanzar un coste en los lineales de 10,20 €/L. A este lo acompañan otros básicos como los huevos con una subida del 55% en destino, y la leche de vaca con el 90%.
El sector cárnico también ha experimentado subidas durante el mes de abril. En cabeza está el cordero con valores que llegan al 309% cuando se comercializa en el supermercado, o la ternera de primera, con una diferencia del 281%.
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