El ‘puzle’ del relevo generacional, bajo la lupa de jóvenes y expertos

¿Hace falta un plan de agricultura para jóvenes o un plan general para la agricultura? ¿Por qué no se homogeneizan los criterios a escala nacional para conceder ayudas a los jóvenes agricultores? ¿Por qué se dan ayudas por igual al que empieza en el campo y al que lleva ya varios años, con un proyecto consolidado?

Estas preguntas saltaron ayer a la palestra durante el encuentro que celebró ayer UPA Joven en Almería, que reunió a alrededor de 200 participantes, con agricultores procedentes de Castilla y León, la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Murcia y otras provincias andaluzas, además de la almeriense, que participaron junto a expertos de la Junta de Andalucía y Cajamar.

Paqui Iglesias, secretaria general de UPA Almería, planteó si el relevo generacional en el campo es real o es una quimera, y enumeró los problemas existentes para su consecución: el envejecimiento de la población, la excesiva burocracia, la volatilidad de los precios, sobre todo, en frutas y hortalizas, la dificultad para acceder al crédito, los altos costes de instalación de una explotación, el complicado acceso a la tierra, la falta de formación reglada y la desigualdad entre comunidades autónomas en cuanto a programas de desarrollo rural, política de subvenciones y requisitos para recibirlas.

Iglesias recordó que en el periodo 2015-2020 se han incorporado al campo en España 5.000 jóvenes, “muy pocos si tenemos en cuenta que hay más de 300.000 profesionales”, dijo.

“Para poner en marcha una explotación avícola hacen falta 200.000 euros; para una granja de cerdos, 300.000 euros; y para un invernadero estándar, 400.000 euros”, aseguró Paqui Iglesias, que recomendó a los jóvenes agricultores que instalen una “dimensión mínima razonable” cuando pongan en marcha su negocio para poder garantizarse una “renta digna” y vivir de esto y en su pueblo toda su vida.

Por su parte, Ana Cabrera, del Área de Innovación Agroalimentaria de Cajamar, explicó las claves para que los jóvenes agricultores puedan acceder más fácilmente a financiación para sus proyectos.