Los almerienses, a la cabeza en contribución al PIB andaluz

Andalucía y Provincias... ¿Cómo hemos cambiado? Ese es el nombre del revelador informe interactivo que pone a disposición de los ciudadanos andaluces la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades de la Junta de Andalucía a través del portal del Instituto de Cartografía de Andalucía.

En definitiva, se trata de una recopilación de indicadores que permiten el estudio de ámbitos temáticos claves en la región como la población y los hogares, la economía, el mercado de trabajo y el medio ambiente. Estos datos permiten contemplar fácilmente los cambios que se han producido en Andalucía y sus provincias desde el comienzo de la Autonomía, desde hace ya más de 40 años, hasta nuestros días.

Y es gracias a ello donde se ve el que se puede considerar enorme cambio que ha vivido la provincia de Almería en las últimas cuatro décadas, unos más disruptivos al principio, otros más en los últimos años, configurando una provincia que en poco se asemeja a la analizada en el inicio del histórico.

El primer dato a tener en cuenta y que refleja la evolución de manera más que patente es el del Producto Interior Bruto, el cual se define como el valor total de los bienes y servicios finales producidos en este caso por la provincia, durante un tiempo definido. Al hablar de bienes finales, se refiere a aquellos bienes y servicios que el consumidor final compra. Aquí Almería ha pasado de poco más de 14.185.millones de euros en 2008 a algo más de 15.318 en 2020, y el PIB por habitante ha pasado 21.291 euros a 21.360. Este dato, pese a que no ha subido demasiado en doce años y que representa el valor de los bienes y servicios producidos por cada persona,erigiéndose como un buen indicador del nivel de vida de los habitantes, además de estar por encima de la media andaluza también es el más alto de todas las provincias de la región.

En cuanto al Valor Añadido Bruto (VAB), que mide todos los bienes y servicios producidos (sean o no para su consumo final), sin impuestos, la economía almeriense ha visto cómo su agricultura ya representa el 4% del total, sumando más de un punto con respecto a 2008. El ámbito de la industria y la energía se mantiene y crece el del sector servicios, el que proporciona el principal aporte económico, suponiendo el 77,3% del total. El único sector donde el VAB baja, además de manera estrepitosa desde 2008, es de la construcción, pasando del 13,6% al 6,3% actualmente.

Atendiendo a la balanza comercial, que se entiende como el registro que un territorio lleva acerca de las importaciones y exportaciones que en él se llevan a cabo durante un período de tiempo determinado y por tanto la diferencia entre las exportaciones y las importaciones, en Almería ha subido desde los 1.151.000.000 euros en 2003 a los 2.315.000.000 en 2020.

El desarrollo en el caso del sistema bancario (sector privado), es de 2.951 créditos en 1987 a los 64.814 en 2020; aumentando en este mismo periodo los depósitos de 4.277 a 49.472.

En cuanto a las hipotecas, había comprometidas 32.899 en total, por valor de 3.075.806.000. Ahora, a datos de 2021, el número de hipotecas baja ostensiblemente durante el periodo analizado de cerca de 20 años y se sitúa en 12.031, comprometiendo 1.095.430.000; siendo el importe medio de 93.000 euros en 1987 y de 91.000 en 2021.