Los pescadores de Almería trabajarán menos días en 2025: "Es un fracaso"

Amarga es la sensación con la que el sector pesquero del Mediterráneo ha finalizado el Consejo de Ministros de la UE. En la práctica, la flota de arrastre podrá trabajar en 2025 los mismos días que en 2024, aunque deberá cambiar los aparejos para que su labor sea más sostenible. Para poder salir a faenar 130 días por año, un espacio de tiempo que ya era visto como insuficiente por el sector, los pescadores deberán seguir el catálogo de doce medidas acordado la pasada noche en Bruselas, como usar mallas de 15mm para que las especies más pequeñas puedan escapar de las redes o implementar las conocidas como 'puertas voladoras'.

"Malo, negativo, un fracaso", así resumía a primera hora de la mañana José María Gallart, presidente de Asopesca, el acuerdo alcanzado en Bruselas. "El 100% de días no los vamos a recuperar, porque para eso toda la flota debería cambiar la malla y creemos que solo lo hará un 80%", cuenta. "Las líneas rojas que se establecieron no se han conseguido, se pierden días y un 10% del TAC de la gamba roja", apostilla, describiendo la sensación de cabreo que ronda en el sector.

La duda está en quién pagará la inversión necesaria para que las flotas puedan cumplir con los nuevos objetivos sostenibles impuestos por la Comisión Europea, pues el ministro del ramo, Luis Planas, ha anunciado este miércoles que se está negociando con la Comisión Europea cargar a las cuentas comunitarias las ayudas económicas que reciba el sector. Falta por leer la letra pequeña del acuerdo, al que se llegó de madrugada y que ha requerido de 48 horas de negociaciones, y que ahora debe ser trasladado a la legislación española por el Gobierno, aunque las nuevas cuotas entrarán en vigor a partir del próximo 1 de enero. "Hay que adaptar los reglamentos de los fondos, no es tan fácil como lo pinta el ministro", dice Gallart sobre el dinero.

La propuesta inicial de la Comisión Europea reducía a 27 los días permitidos para faenar en el año 2025, lo que era considerado por el "sector" como una ruina, al poner en riesgo el medio de vida en la mar. Las lonjas de la provincia pararon tanto el lunes como el martes en repudio de las intenciones del ejecutivo comunitario y buena parte de quienes forman parte de esta actividad económica se desplazaron a Madrid para protestar frente a la sede de la Comisión Europea. Entre los desplazados, frustración por el acuerdo alcanzado en el Consejo de Ministros de la UE. Cristóbal Hernández, armador de uno de los barcos que salen de Almería, cree que el ministro Planas "está vendiendo un triunfo y no es así", al ver la inversión que tendrán que afrontar quienes quieran sumarse ante estas medidas. "Crees que puedo pagar 70.000 euros para pescar 80 días en vez de 96", pregunta en conversación con Diario de Almería.

¿Cómo se podrán recuperar días de pesca en 2025?

•  30 % más si se realiza un cambio de malla a los 45 milímetros para la pesquería de la costera y hasta un 50 % para la pesquería de profundidad con una malla de 50 milímetros
• 15% más por una veda temporal de cuatro semanas
• 3% por veda de 800 a 1.000 metros de profundidad
• 10 % con una parada de seis semanas entre 100 y 500 metros de profundidad
• 3% por establecer las puertas voladoras

Menos días, menos posibilidades de pesca

A la reducción de días para la pesca que suponen las nuevas cuotas pactadas para 2025 se suma la reducción en las capturas permitidas el próximo año. La estimación es que se pierda un 10% de lo que antes se podía pescar, aunque la primera propuesta que llegó desde Bruselas implicaba una reducción de hasta el 30%. Saldrán menos días y, las jornadas que puedan, llegarán con menos pescado a la lonja, lo que implicará menos ganancias.

Clave para esta reducción en las posibilidades de pesca es la necesidad de ser más selectivos y permitir que las especies más pequeñas escapen de las mallas de las flotas, bajo la premisa de cuidar el ecosistema marino. "Aquí ya se probó y con el cambio de malla coges la mitad", apostilla Hernández, que advierte del perjuicio económico que estas nuevas medidas van a suponer.

Dejar la pesca, ¿una solución?

La pregunta está ahora en si dejar la pesca es la única salida posible para quienes no puedan afrontar la "ruina", en palabras de Hernández, que supone este acuerdo. "Que abran los desguaces para dar los barcos y buscar otro trabajo, ahora que somos jóvenes y podemos", llega a clamar el armador en la conversación mantenida poco después de saberse los flecos del acuerdo. "Quién va a querer trabajar tres o cuatro meses al año", añade.