El Parvispinus afecta al 30% de la superficie del pimiento en Almería
Plagas
El Thrips parvispinus, representa un grave desafío para los agricultores, causando deformaciones y pérdidas significativas en el cultivo
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En este comienzo de año, el Thrips parvispinus continúa siendo un gran desafío para los productores de pimiento en la provincia de Almería. Originaria del sudeste asiático, esta especie fue detectada por primera vez en España en 2020, en plantas ornamentales. Actualmente, representa un peligro serio debido a los graves daños que causa.
Un aspecto importante es que los daños en los frutos son principalmente estéticos, afectando a su apariencia y reduciendo su valor comercial, pero no comprometen su calidad ni su seguridad alimentaria. Sin embargo, las consecuencias económicas son significativas, ya que los consumidores suelen rechazar productos con imperfecciones visibles.
Esta campaña se ha registrado un incremento notable en la incidencia de esta plaga, afectando aproximadamente al 30% de la superficie cultivada de pimiento en la provincia. Este aumento está obligando a los agricultores a realizar ajustes en sus prácticas de cultivo, como adelantar los arranques de pimiento para dar paso a trasplantes de sandías, calabacín y pepino. Estos cambios podrían generar desequilibrios en el mercado de estas hortalizas en la próxima campaña.
Los principales daños observados incluyen el aborto de yemas y flores, deformaciones en los brotes apicales y una disminución en el crecimiento vegetativo. Aunque esta plaga no transmite el virus del spotted wilt, los síntomas que provoca son similares a los generados por otras plagas como Polyphagotarsonemus latus (araña blanca).
El manejo del Thrips parvispinus en cultivos de pimiento requiere estrategias integrales. Entre las medidas de prevención se destacan el mantenimiento de cerramientos adecuados en invernaderos, el uso de placas cromáticas y el monitoreo constante para localizar focos. En prácticas culturales, solarizar el suelo, cubrirlo con plástico o tela y eliminar malezas son acciones clave. No obstante, existe una preocupación creciente debido a la falta de herramientas para combatir esta plaga. Las soluciones actuales, no son suficientes para frenar la expansión del parvispinus ni mitigar completamente sus efectos.
Para el control, es efectivo introducir fauna auxiliar como Orius laevigatus y reforzarla en áreas estratégicas, junto con tratamientos fitosanitarios autorizados aplicados correctamente y compatibles con el control biológico. Estas acciones, son fundamentales para proteger los cultivos.
ASAJA Almería subraya la falta de herramientas suficientes para combatir de manera efectiva esta plaga, lo que incrementa la preocupación entre los agricultores. Además, recuerda a los agricultores la relevancia de los seguros agrarios, particularmente la línea 306, como herramienta clave para protegerse frente a las adversidades como las ocasionadas por el parvispinus.
Asaja insta al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que facilite materias activas para combatir esta situación y proteger el sector agrícola. Asimismo, solicitamos a la Conserjería de Agricultura de la Junta de Andalucía que, a través del departamento de sanidad vegetal, tome medidas para controlar la expansión del parvispinus en la provincia.
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