El cerco, un arte a la luz de la luna
El puerto pesquero de la capital cuenta con 14 buques dedicados a esta actividad, que generan 150 empleos directos La pesca de traíña supone el 31% de los ingresos de la lonja de Almería
Una de las artes que practican los pesqueros que tienen como sede el puerto almeriense es el cerco. Desde épocas remotas se utilizan en el Mar Mediterráneo redes para cercar los peces, actividad que continúa en estos días. La pesca de cerco llega desde Estados Unidos y fue desarrollada en el siglo XX para pescar costa afuera peces cuya costumbre es nadar formando densos bancos, ya sean en superficie o a media profundidad. A los barcos que desarrollan la modalidad del cerco de jareta se conocen como traíñas. En la capital son 14 buques de cerco los que faenan cada noche y los que generan 150 puestos de trabajo directos.
En el pasado año, la lonja almeriense movilizó más de 3 millones de kilos de pescado de cerco por valor de 2,9 millones de euros; mientras el resto de artes generaron 6,4 millones de euros gracias a la venta de 866.654,61 kilos de pescado y marisco. De acuerdo a los datos facilitados por la Asociación de Empresarios de la Pesca de Almería (Asopesca), el cerco supuso en 2014 el 31% de los ingresos de la lonja y un 78% del volumen de pesca.
La especies capturadas a través del arte del cerco son la sardina, el jurel y la caballa principalmente, que coinciden con los reyes de las aguas de la provincia. Tras cercar el banco de peces se cierra el fondo de la red capturando a la presa embolsándola. En la parte superior de la red se dispone de un número adecuado de flotadores, o relinga de corchos, que la mantienen en posición vertical, cuando se utiliza. En la parte inferior lleva una serie de plomos, que ayudan al mantenimiento vertical, contando además con un conjunto de anillos por los que pasa un cabo resistente llamado "jareta".
La pesquería de cerco tiene lugar de noche, en fondos no muy alejados de la costa, entre 60 y 150 metros de profundidad. Las embarcaciones de cerco son de las mayores, con una eslora mínima de nueve metros en el Mediterráneo, once metros en Canarias y Golfo de Cádiz y hasta 18 metros las del Cantábrico y Noreste, tal y como se detalla en la Guía Técnica sobre Artes de Pesca, difundida a través de pescaverde.org y en la que participan la Unión Europea, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y la Federación Nacional de Asociaciones Provinciales de Empresarios Detallistas de pescados Frescos y Congelados (Fedepesca).
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