En Almería faltan más de 3.000 trabajadores de la construcción

La nueva crisis del ladrillo

La caída del sector en 2.008 provocó que muchos de sus profesionales tuvieran que reconvertirse

Hoy, unido al encarecimiento de los materiales, ha provocado la alarma

Promotores almerienses avisan del retraso por falta de materiales y falta de cualificación en la mano de obra.
Promotores almerienses avisan del retraso por falta de materiales y falta de cualificación en la mano de obra.
Francisco Maturana

03 de noviembre 2021 - 06:30

“En la provincia de Almería faltan actualmente más de 3.000 trabajadores especializados en el gremio de la construcción”. Esta afirmación, de Andrés Montiel, secretario General de la Asociación de Promotores Constructores de Almería (APC Almería), refleja la complicada situación que vive un sector que ya antes de la crisis sanitaria comenzó a reflotar después de casi una década en mínimos históricos y con un stock de vivienda vacía que poco hacía presagiar la actual recuperación.

La preocupación es máxima en la construcción almeriense, porque a este fenómeno hay que unirle el encarecimiento y desabastecimiento de los materiales de obra, que tras la reactivación económica ha visto como se han disparado los costes y está paralizando buena parte de la actividad, fenómeno este que se ha acentuado decisivamente tras la pandemia y al que no está ajeno ningún sector por la falta de materias primas y el déficit logistico. Un cuello de botella que está provocando que sea más difícil aún cumplir con los plazos para poner a disposición de los clientes las viviendas.

No solo faltan albañiles, “sino de todos los oficios. No hay personal cualificado suficiente. Todo tiene su explicación en la evolución del sector en el periodo 2005-2018 y la necesidad que tuvieron la mayor parte de estos profesionales de reconvertirse y dejar de lado este ámbito. Hoy, ya no están disponibles e incluso se está recurriendo a mano de obra extranjera, pero es tanto lo que han evolucionado los sistemas de obra que no existen especialistas de verdad”, explica Montiel sobre un problema sobrevenido que atañe al proceso de construcción, el cual ralentiza mucho.

Directiva de la Asociación de Promotores Constructores de Edificios de Asempal Almería (APCEA), presidida por Juan Murcia Puertas.
Directiva de la Asociación de Promotores Constructores de Edificios de Asempal Almería (APCEA), presidida por Juan Murcia Puertas.

La tormenta perfecta se complementa con unos costes que a la larga van a repercutir en el cliente. Sin embargo, actualmente, y en la obra nueva ya reservada, “los precios se van mantener, porque es una cuestión contractual, pero los márgenes para los promotores van a ser mucho más ajustados puesto que los proveedores están encareciendo los materiales casi a diario”.

Los escasos perfiles existentes están siendo absorbidos por la rehabilitación

Otro aspecto a destacar es que el subsector de la rehabilitación, ante el gran dinamismo que están experimentando estas obras, sí está absorbiendo buena parte de la mano de obra cualificada en construcción, explica el secretario General de la Organización Empresarial Andaluza de los Constructores (Fadeco Contratistas), Jorge Fernández-Portillo, quien asegura que a nivel regional faltan 119.000 trabajadores cualificados de la construcción y además desvincula por completo este problema de las razones salariales que aducen los sindicatos, pues es un fenómeno al que se ha aludido por su parte.

El salario medio en los distintos convenios provinciales está en torno a los 22.000 euros

Es más, según Montiel, en Almería estos profesionales cotizan mucho más que hace unos años precisamente por la escasísima demanda. “El salario medio del sector de la construcción en los distintos convenios provinciales es de 22.000 euros, que es 4.000 euros por encima del salario mínimo interprofesional. No es una cuestión de salario, sino un problema más profundo, más estructural vinculado a la formación, a la imagen del sector y no es una razón salarial, ni mucho menos”, afirma el secretario general de Fadeco Contratistas.

Una bajada drástica hasta llegar a unos 10.000 trabajadores

Según explican desde la Organización Empresarial Andaluza de los Constructores (Fadeco Andalucía), la tensión en el mercado que se vive en este momento, con falta de mano de obra cualificada, se ha producido al reactivarse la construcción en el sector teniendo 300.000 trabajadores menos en Andalucía que antes de la crisis de 2008, señala el secretario general de la institución, Jorge Fernández-Portillo. Los 500.000 trabajadores que tenía el sector en los años 2003/2004 se han reducido a 200.000 trabajadores en la actualidad, de los cuales unos 50.000 están en Sevilla y otros tantos en Málaga, seguidas de Cádiz (29.000) y el resto se reparte entre Granada, Córdoba, Huelva, Jaén y Almería. A este fenómeno hay que unir un desabastecimiento y correspondiente encarecimiento de los materiales de construcción que desde Fadeco Andalucía, por el momento, entienden que tiene complicada solución, y que no ha hecho más retrasar la actividad en un 39% de 300 empresas del sector a nivel nacional, y la consiguiente pérdida de márgenes de beneficio para los promotores, por lo que compromete el cumplimiento de los plazos en muchas obras.

La falta de cualificación no solo atañe a albañiles, también al resto de oficios

No son solo albañiles, sino que también fontaneros, yeseros, carpinteros... y muy especialmente electricistas; algunos de los perfiles profesionales que escasean dentro del amplio de actividades que desarrollan dentro de una obra. Este fenómeno no solo lo conocen los propios empresarios, sino que también se extrapola a las empresas de colocación, que ven como les es muy difícil, casi imposible encontrar profesionales de estos perfiles. Y si los encuentran, siempre presentan el mismo problema y que a la postre es decisivo: falta de formación. Desde Instaladora Andarax, empresa dedicada a las instalaciones eléctricas y con cerca de cuarenta años de experiencia dentro del sector en Almería, explican que la escasa cualificación es el principal problema que se encuentran en este momento a la hora de incorporar a nuevos profesionales. “Lo que antes se llamaba un oficial bien sea de electricidad, como es el caso de mi empresa, o bien de albañilería, por ejemplo, ya prácticamente no existe. Lo ideal sería tener la oportunidad de formar a los pocos profesionales que hay ahora mismo en el sector para que alcancen este nivel de conocimiento y de aptitudes, pero no es posible ya que eso repercute por un lado económicamente, ya que es complicado invertir tanto en una persona de estas características, más aún cuando no sabemos si la recuperación actual durará uno, dos o tres años. Y por otro lado está el factor tiempo, esa es otra gran inversión necesaria y que en el momento actual es inviable. Enseñar a alguien requiere de muchos meses y las obras tienen un plazo muy delimitado que hace que en este momento sea difícil de acompasar”, argumentan desde la empresa almeriense Instaladora Andarax.

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