La UAL investiga la influencia que tienen los plaguicidas en males como el cáncer

El responsable de la Delegación de Salud, Tesifón Parrón, desarrolla la labor de docente de Neurociencia y Ciencias de la Salud paralelamente a la de investigador y responsable del grupo de investigación Plaguicidas, Salud y Medio Ambiente de la Universidad de Almería (UAL). El último trabajo que tiene entre manos es uno de los más ambiciosos. Analiza la influencia directa de los fitosanitarios en más de una docena de patologías, entre las que se incluyen el Alzheimer o el Parkinson. Se trata de una serie de estudios desarrollados en el seno de un grupo creado hace más de 10 años por la Consejería de Salud denominado "de expertos en plaguicidas". En esta comisión participan personal investigador de la Universidad de Granada (dos catedráticos especialistas en toxicología), Jaén (un catedrático especialista en Medicina preventiva y Salud Publica), Almería (profesores especialistas en Medicina Preventiva y expertos en Epidemiología de la Delegación de Salud de Almería y del Hospital de Poniente), así como epidemiólogos de la Consejería de Salud .

-Su equipo lleva años estudiando la influencia de los plaguicidas en el ser humano. ¿Qué estudios destacaría?

-En la actualidad estamos trabajando para estudiar la incidencia de diversas patologías por exposición a plaguicidas, cáncer, polineuripatías, criptorquidismo... pero anteriormente se ha trabajado en diversas líneas como el desarrollo de un sistema de registro que nos ha permitido ver la evolución de las intoxicaciones y las características de éstas, quizá el primer registro en España con estas connotaciones. También hemos investigado en prevención de Salud Laboral, planteando nuevos biomarcadores de exposición para los trabajadores de invernadero, así como determinación de polimorfismos genéticos que podrían evitar las re intoxicaciones que a veces ocurren por déficit enzimáticos de algunos trabajadores, recogido en el libro 'Vigilancia de los trabajadores expuestos a plaguicidas', editado por la Consejería de Salud.

-¿Qué patologías se dan con más frecuencia en zonas en las que se utilizan plaguicidas?

-La toxicidad existente en los trabajadores que no se protegen adecuadamente pueden incrementar el riesgo de cánceres y de alteraciones neurológicas como polineuropatías, Parkinson, etcétera, así como alteraciones de la reproducción, hechos demostrados en numerosísimas publicaciones, algunas de ella de nuestro equipo y otras muchas de numerosos países en los que se utilizan de forma profusa aún. En realidad en la población en general no se observan diferencias excesivamente llamativas, pero sí en los trabajadores, especialmente cuando no se protegen, aunque en los últimos años el descenso de intoxicaciones ha sido realmente espectacular. El año pasado sólo tuvimos 12 intoxicaciones leves frente a las más de 400 que teníamos en los años '90, y por sustancias mucho más nocivas.

-¿Se puede afirmar, entonces, que sean los plaguicidas los elementos directos que causan determinadas enfermedades? (Por ejemplo, la incidencia de casos de cáncer en vecinos de la zona del Poniente).

-Es muy difícil establecer en salud relación causal, se necesitan muchos años de investigación y muchos estudios y aún así es necesario plantearlo con cautela, se puede alarmar a la población innecesariamente, pero lo que sí está demostrado es que muchas de estas sustancias son de elevada toxicidad. Afortunadamente ya cada vez se utilizan menos en nuestro entorno, ya que se ha apostado por una agricultura limpia de venenos.

-¿Cuáles son los plaguicidas más nocivos para la salud? ¿Se siguen utilizando actualmente?

-Los plaguicidas más nocivos son los de más alta toxicidad y en cada grupo de ellos existen gamas que van de más a menos toxicidad, también depende de la concentración en que se utilicen y el entorno, más o menos cerrado, pero en general podríamos decir que los mas tóxicos son los Organoclorados, sobretodo por el efecto acumulativo en grasa que tienen, seguidos de los organofosforados, los carbamicos y los piretroides. Afortunadamente cada vez se utilizan menos los organoclorados, porqué prácticamente todos tiene, prohibido su uso en nuestro entorno, algo parecido ha ocurrido con algunos organofosforados muy tóxicos.

-En los últimos tiempos se habla mucho de la 'revolución verde' y los mecanismos de producción integrada, ¿cree que realmente se ha producido un avance en términos de salud?

-Estoy totalmente a favor de este planteamiento. La humanidad ha vivido y desarrollado la agricultura desde hace miles de años sin necesidad de recurrir a sustancias tan toxicas, la propia naturaleza tiene sus formas de lucha contra las plagas, si la observamos y somos capaces, con el adecuado desarrollo tecnológico de reproducir su comportamiento en el entorno especial del invernadero, podremos cultivar minimizando el uso de sustancias nocivas. Los avances en salud se están palpando en nuestro entorno, hemos descendido de forma brusca las intoxicaciones en apenas 10 años, mientras que países que los siguen usando están aumentado. Si a eso unimos la capacidad de investigar plantas con más capacidad de favorecer antioxidantes, ácidos grasos protectores, terpenos modificados como el taxol, resveratroles y una gama enorme de sustancias naturales anti envejecimiento, antitumorales o antiinfarto, lo que Bauman llamó alimentos funcionales, podremos trasladar al consumidor no sólo una agricultura limpia, ecológica, sino una agricultura que fabrica Salud con mayúsculas.