Cajamar compra el palacio emblemático González Campuzano en Murcia

La filosofía de Cajamar de adquirir edificios emblemáticos en aquellos territorios en los que opera y que, además, cuenta con raíces y son un foco estratégico de su negocio, continúa. La cooperativa de crédito almeriense ha comprado el palacio González Campuzano, un inmueble de gran valor, ubicado en la Plaza de Julián Romea de la capital murciana.

La operación ha culminado después de que la caja rural almeriense presentó una oferta por el inmueble, en respuesta a la subasta lanzanda por la Comunidad Autónoma de Murcia para conseguir liquidez de forma inmediata, con el objetivo de recaudar un total de 20 millones de euros, según publica La Verdad.

El plazo para la presentación de plicas de la subasta por este inmueble finalizó ayer a las 14:00 horas, momento en el que la única oferta que se había presentado era la procedente de Cajamar, de ahí que tenga garantizada la adquisición, lo que se producirá de forma oficial el viernes, que es la fecha fijada para abrir los sobres, en este caso, el único existente, que otorgará la compraventa a la caja rural presidida por Juan de la Cruz Cárdenas.

El palacio González Campuzano, situado en la plaza de Julián Romea, frente al Teatro Romea, supone un paso más en la apuesta de Cajamar por esta comunidad, que ya abrió una oficina emblemática en marzo de 2010, en pleno centro de la capital, en la Plaza del Cardenal Belluga.

Este nuevo edificio se suma a su filosofía de mecenas del patrimonio urbanístico histórico, con un inmueble que el gobierno murciano tasó en 14,6 millones de euros, según publicó el Boletín Oficial de la Región de Murcia, cuando hizo pública su intención de deshacerse de nueve inmuebles para 'hacer caja', que en conjunto sumaban un valor de más de 50 millones.

Este palacio, que había sido sede de la Consejería de Cultura y Turismo, se une a Las Mariposas, en la capital almeriense, el de la Alameda Principal, en Málaga, y el edificio Gobelas de La Castellana, en Madrid.