El rompecabezas de Löw ante Francia

Las lesiones y las sanciones obligan al seleccionador alemán, Joachim Löw, a resolver un rompecabezas en las próximas horas antes de medirse a Francia en las semifinales de la Eurocopa. A las bajas ya anunciadas de Mario Gomez y Mats Hummels se unió la de Sami Khedira, otro titular que no recuperará a tiempo de su lesión muscular en el abductor del muslo izquierdo.

"Sami Khedira no podrá jugar el jueves. Haremos todo lo posible para que pueda jugar una posible final", dijo Löw en una rueda de prensa en Évian-les-Bains, donde se concentra la campeona del mundo. Gomez dijo adiós al torneo por una lesión muscular -está descartado incluso para una hipotética final- y Hummels no podrá jugar ante Francia en Marsella por acumulación de amarillas. A ellos podría unirse próximamente el capitán, Bastian Schweinsteiger, que arrastra una lesión de rodilla desde el sábado, cuando Alemania superó a Italia en los cuartos de final en la tanda de penales. El jugador de 31 años hizo hoy sólo ejercicios de bicicleta. "El partido contra Italia, con sus 120 minutos, ha dejado huella. Tendremos que hacer cambios y buscar soluciones", señaló Löw, que ya da vueltas al plan para frenar a la anfitriona. "Tenemos lesiones, pero las aceptamos. Sabemos lo que tenemos que hacer", expuso el técnico después de cambiar el entrenamiento de hoy. "Aquellos que no jugaron ante Italia necesitan más carga. Porque dos o tres de ellos tendrán que jugar el jueves".

La principal duda está en el medio del campo, en saber quién será el acompañante de Toni Kroos en el cuadro de mandos. La primera opción sin Khedira es Schweinsteiger, pero es posible que no se recupere a tiempo. "Espero que lo consiga porque es un jugador que nos puede dar mucho", indicó Löw, aunque agregó: "No voy a dejar jugar a ningún lesionado que no esté al cien por ciento". Así, los focos del estadio Velodrome de Marsella apuntarán a un actor secundario. Los principales candidatos para formar el doble pivote junto a Kroos son los jóvenes Emre Can (de 22 años y jugador del Liverpool) y Julian Weigl (20 y del Borussia Dortmund). El primero aporta robustez y el segundo más toque en la salida del balón. Joshua Kimmich también podría ocupar ese puesto, pero Löw lo prefiere en la banda derecha, donde ya jugó ante Italia.

En la delantera todo apunta a que Löw, ante la baja de Gomez, un 9 puro, regresará al falso delantero con Mario Götze moviéndose entre líneas y llegando al área junto a Thomas Müller. "Al igual que en el partido de Italia, el jueves habrá dos grandes equipos. Los franceses no juegan tan defensivo como los italianos y tienen jugadores muy fuertes delante. Me encantan este tipo de partidos ante equipos tan fuertes", analizó Löw. "Los franceses tiene muchísima confianza en sí mismos y tienen en Marsella a un fantástico público detrás suyo. El equipo además tiene mucha dinámica, fuerza y poderío", alabó el técnico a "Les Bleus", que el domingo superaron 5-2 a Islandia con un festín de sus delanteros.

Löw, que fue criticado en Alemania por cambiar de sistema ante Italia y alinear a tres centrales, aseguró que un equipo no puede fijarse únicamente en las fortalezas y debilidades propias. "No se puede jugar y decir: 'Jugamos como siempre, el rival nos da igual'. Sería imprudente, ingenuo y poco profesional", analizó el seleccionador.