El Poli Ejido impone la ley del más fuerte ante el 74
Monólogo Los celestes controlaron todas las facetas del juego desde el inicio y no dieron opción alguna al equipo de Marsá Resultado corto Las oportunidades de gol se fueron sucediendo para un Poli al que sólo le faltó algo más de puntería


Algo está cambiando en el Polideportivo Ejido. Se lleva percibiendo desde la pretemporada y se está corroborando en el inicio de la competición. Este equipo tiene muy buena pinta y tiene bastante claro lo que quiere conseguir y cómo lo quiere conseguir. Y lo más importante de todo es que está demostrando que tiene argumentos futbolísticos para lograrlo. Tanto es así que la propia parroquia celeste acabó el encuentro de ayer haciendo la ola, algo que se antojaba impensable en los últimos años.
Y el motivo de que el público correspondiera a los suyos de esta manera fue el gran sacrificio que realizó el equipo en el día de ayer para doblegar al Granada 74 por un dos a cero que se antoja infinítamente corto para mostrar las enormes diferencias que hubo en el campo entre ambos conjuntos.
Sin embargo, lo cierto es que el choque empezó con un arrebato de los granadinos progatonizado por un viejo conocido, Bordi. Un futbolista que ya había vivido tardes de gloria en Santo Domingo y al que se le concedió el privilegio de realizar el primer disparo a puerta del partido. Primero y único del Granada 74 entre los tres palos en todo el encuentro.
Y, tras ese escarceo inicial de los rivales, fue cuando comenzó a funcionar la maquinaria de los hombres de Lucas Cazorla. Unos jugadores que eran los mismos que saltaron de inicio ante el Roquetas y que al igual que ocurrió hace siete días estaban dispuestos a resolver el choque por la vía rápida.
Aunque, lo cierto es que en esta ocasión lo que hicieron fue protagonizar una primera mitad espectacular. Todas las facetas del encuentro estaban en manos de los celestes y las internadas de Juli y Antoñito por ambas bandas eran un mal para el que los de Rivera no tenían remedio alguno.
Pero, lo que son las cosas del fútbol, el primer gol llegó de una jugada aparentemente inocente como es un saque de banda. En el minuto 21, Juli sacó para Molina y éste se revolvió sobre si en el vértice del área. A su paso empezaron a salir defensas y, en ese momento, hizo la jugada de su vida. Como si de Maradona se tratase comenzó a sortear hasta tres rivales hasta que se topó con el guardameta. La jugada merecía el premio del gol pero Darío rechazó su remate. Pero, por suerte, Nakor andaba por allí para recoger el rechace y adelantar al Poli.
A raiz de este tanto, los celestes se desbocaron y las ocasiones de gol empezaron a sucederse una y otra vez sobre la portería de un Granada 74 al que le supo a gloria el hecho de que cuando el colegiado del encuentro decretó que llegaba el descanso, el resultado fuera de sólo 1-0.
Y tras el descanso llegaron los cambios en el equipo de Marsá. También los hubo en el Poli. Pero don de no cambió absolutamente nada fue sobre el césped, ya que el Poli siguió ejerciendo su dominio en todo momento y los granadinos seguían incapaces de ni siquiera merodear el área del Poli. De este modo, el hecho de que llegara un nuevo gol para el Poli era cuestión de tiempo y, finalmente, llegó con un remate de cabeza de Juli a pase de Roberto en el minuto 59.
Con este triunfo, los celestes siguen en la parte alta de la tabla y ratificando que van muy en serio.
También te puede interesar
Lo último