Se juega hasta que no pite el colegiado (1-1)

Lucas Alcaraz se está acostumbrando a ver a su equipo encajando un gol en los últimos cinco minutos, algo que no se puede permitir en liga y que se volvió a repetir ayer. Antes de eso, el Almería jugó bastante mejor que el conjunto granadino.

Los almerienses dieron un susto al principio. Fernando Soriano envió un balón al palo que después pudo atajar Roberto. Y tras esa acción llegó poco después el tanto del equipo de Lucas Alcaraz. Fue en una jugada a balón parad. En un saque de esquina Ulloa remata sin oposición y sorprende a la zaga granadina. Volvió a crear peligro de nuevo más tarde el Almería a balón parado.

Por su parte, el Granada no funcionaba y antes de que concluyera Fabri retiró a Jaime Romero para hacer sitio en el equipo al extremo francés Mollo. El partido se le complicó aun más al Granada al ser expulsado Diego Mainz. El defensa central madrileño recibió la segunda amarilla y dejó a su equipo en inferioridad. La acción fue protestada por Fabri, que también recibió la roja por parte del colegiado. Diez minutos después entró Corrales y el Granada volvió a jugar con once en un gesto de deportividad por parte del Almería.

Y cuando todo parecía que el partido iba a suponer la primera derrota de la pretemporada llegó el tanto del empate por medio de Boateng tras remachar bajo palos un envío en vaselina por parte de Mollo.