Entre el duelo y la diversión

Lucas Alcaraz tenía sentimientos encontrados en sala de prensa. Por una parte estaba contento porque su equipo había entretenido a la afición regalándole una goleada, pero por otra no podía olvidar el fallecimiento de un seguidor rojiblanco por una parada cardiorrespiratoria: "En nombre de la plantilla y el cuerpo técnico queremos aprovechar para brindarle la victoria. Al principio estábamos algo confusos y lamento mucho que esto haya pasado".

El preparador granadino se felicitó después por el buen juego en términos generales desplegado por sus pupilos: "Ha sido bastante homogéneo en todo. El equipo ha controlado, llegando y jugando bien. La gente se ha divertido y es difícil en Segunda ganar un partido jugando bien".

Pese a la manifiesta superioridad reflejada sobre el terreno de juego, Alcaraz incidió en que hubo momentos de cierta dificultad: "Ha habido una fase con 0-0 que no tenía pinta de facilidad, pero el equipo ha leído el partido bien cuando el marcador iba equilibrado y cuando íbamos por delante. Ha sido mérito nuestro".

Ulloa, Goitom y Aleix Vidal fueron los grandes protagonistas si bien Alcaraz no quiso olvidarse del trabajo del resto del plantel: "Todo equipo que quiera estar arriba tiene que tener gente que sea capaz de generar y convertir, pero también destacaría el trabajo de los cuatro de atrás, los mediocentros, la gente que ha salido después... Todos han estado a un gran nivel".

Tras abandonar el fin de semana pasado las seis primeras plazas, el triunfo sirve como bálsamo para lo que está por venir, dos salidas consecutivas a Alcoy y Tarragona: "Lo importante es tener regularidad y sacar los tres puntos en las buenas rachas. Hay que seguir sumando, he terminado la primera vuelta con cuarenta y tantos puntos y no he ascendido y con treinta y tantos sí. Hay que estar siempre cerca de la parte de arriba y yo confío plenamente en el equipo porque los veo trabajar a diario, nos van a llevar arriba".