El clásico de los ‘equipos de autor’ promete un duelo táctico para Unicaja Almería

Almería/Pablo Ruiz, a sus 33 años recién cumplidos, va a hacer su primera ‘peregrinación’ a otro templo del voleibol como es Los Pajaritos. No, no es la primera vez que juegue allí, como tampoco antes en Los Planos o Son Moix, pero sí se presentará como primer entrenador. Le aguardará una de las mejores aficiones de España, por saber de vóley y por animar a su equipo incansablemente, y un buen amigo. Alberto Toribio lo tuvo de segundo técnico en las categorías inferiores de España, y por eso y por compartir charlas después, con la pasión común de ambos por este deporte, se conocen muy bien.

Evidentemente, ambos buscarán minimizarlo lo máximo posible, buscarán sorprender al otro, buscarán las rendijas en el rival, pero, a buen seguro, sin sacrificar su plan de juego en exceso. Ambos equipos, Unicaja Costa de Almería y Grupo Herce Soria, son de esos a los que se les puede definir como ‘de autor’, muy marcados por sus respectivos técnicos y perfectamente trabajados. La meticulosidad es otra característica que ambos tienen en común, y Ruiz, además, tiene un buen modelo en Toribio, al ser este vallisoletano de 48 años quien ha reverdecido laureles sorianos: una Copa y dos subcampeonatos ligueros.

Es la pieza clave de un proyecto al que se le quedó corto el medio plazo para pasar a la gloria muy rápido. Levantó el torneo del KO que organizó hace dos años y ha jugado las dos últimas finales de la Superliga, cediendo en ambas ante Guaguas. Precisamente al gigante grancanario viene de vencer en la última jornada, el pasado sábado, además en la pista amarilla. Todo un aviso de que el bloque no ha cambiado demasiado a pesar de la ausencia de tres nombres propios de gran relevancia. Se retiró su gran capitán, Manu Salvador, como también su eléctrico líbero, San Martín, y Lucas Lorente voló a Bélgica.

Continuidad en el plantel soriano

Pues nada de eso parece haber hecho mella en un grupo que sí que tiene continuidad en todo lo demás, de joven colocador a joven colocador, de Lorente a Arjones, talento en estado puro el de Boiro, ahora además ganando madurez a los mandos de un grande del vóley español. Por Álex San Martín, con retirada prematura, a los 29 años, ha llegado un hombre experto como José Osado, procedente de Palma y cuyos orígenes están en Textil Santanderina. Quien no tiene sustituto, porque es imposible que así sea, es Salvador, al que solo cabe admirar la impoluta hoja de servicio siempre fiel al celeste de su tierra.

El resto del equipo de inicio es exactamente igual que el curso pasado, con la pareja de receptores formada por Pepe Villalba y Adrián Olalla, el primero muy hecho ya y garantía de rendimiento, y el segundo sin techo en este deporte. El ataque es responsabilidad del portugués Bruno Cunha, anotador como profesión, cuyo encaje en Soria ha sido perfecto. En cuanto a centrales, solvencia en la pareja integrada por Fabián Flores, el argentino, y Joan Domenech, que de la Permanente fue a Barça y pasó directamente a Los Pajaritos para consagrarse como todo lo que se esperaba de él en Palencia.

Además de los siete habituales, la plantilla soriana se va hasta quince efectivos, con otro cambio que destacar, el de Luke Belda, ahora en Palma, por la joven futura estrella Carlos Montero, receptor, fichado de la Permanente y de la generación de Motos y Tarrazo, al igual que Moisés Rodrigo, central. Otro fichaje joven es el de Tomas Zazo, opuesto, con la misma procedencia que Montero, y los demás, y continúa la pléyade de juventud con Alejandro Villalba, que se inició en Pizarra, central, Rodrigo Jiménez, canterano, líbero, o Bernat Castellá, colocador leridano. Como el ‘veterano’ en el banquillo, todo un revulsivo, el incombustible Santi Aulisi, receptor argentino, y Óscar Arnáiz, colocador.

Así, Grupo Herce Soria tiene un bloque inicial muy claro y mucho talento por pulir, misma fórmula que le ha llevado hasta la cima en las pasadas temporadas. De hecho, en esta parece que no faltará a la lucha por las cosas importantes, tal y como demuestra que solo ha cedido una derrota en liga, y fue en la primera jornada (3-1 en San Roque). Su inicio no fue bueno, porque esa semana perdió contra Cisneros por 3-1 también en la primera eliminatoria de la Challenge Cup. Desde entonces, día 10 de octubre, ha ganado todo y va en progresión. Negativo, que aquel 3-1 en Tenerife tuvo una respuesta de 3-0 en Soria, con parciales muy amplios, pero se cedió 14-16 en el set de oro y cayó eliminado.

Carácter y sistema, marcha tercero en la clasificación, con 13 puntos, cinco más que los verdes, pero con un partido más. Ha jugado dos tie-breaks, el referido frente a Guaguas de la semana pasada y en casa contra Teruel en aquel inicio titubeante de competición. En medio, 3-1 a Manacor, la única derrota encajada por los baleares, que seguramente son el equipo revelación del curso, 1-3 a Cisneros, en la venganza por la eliminatoria de competición europea, y 3-0 a Arenal Emevé Lugo. Por lo tanto, en casa suma un tres de tres y solo ha dejado escapar un punto, siendo Los Pajaritos el fortín de siempre.

Con la misión de conquistarlo viajan los ahorradores para iniciar una semana muy dura de tres partidos, con vuelta de Soria el domingo para entrenar el lunes y partir el martes hacia Tarragona, regresar para entrenar el vienes y jugar en casa frente a Manacor, que, por cierto, esta semana se juega el liderato recibiendo a Guaguas y tiene opciones de llegar al Moisés Ruiz en lo más alto de la tabla. Sin duda, es un tramo clave para el primer objetivo de Unicaja Costa de Almería, el de clasificarse para la Copa del Rey, apoyado ahora en la confianza que da la victoria solvente ante San Roque. Pitan el partido Juan Antonio Erce, de Cáceres, y Rafael González, de Alicante (19:30 horas de este sábado).