Victoria del CD El Ejido ante el Recreativo Granada (2-0)

El Ejido/Llevaba un par de semanas diciendo Alberto González, técnico del CD El Ejido, que los buenos resultados llegarían en cuanto su equipo fuese recuperando efectivos. Y no se equivocaba. Esta mañana, el cuadro celeste recuperaba a jugadores importantísimos como Corral y Alfonso, al igual que hizo varias jornadas antes con Velasco o Molo. Casualidades de la vida, la lesión de Javilillo obligó al malagueño a dar entrada a Corral en el minuto 9 y el granadino, como siempre, allanó el camino de la victoria a los suyos. Un triunfo que Santo Domingo llevaba esperando desde el 16 de septiembre, día en el que los almerienses dieron la última alegría a sus aficionados al imponerse 2-1 al Villanovense. Desde aquel choque, hace más de dos meses, los del Poniente no marcaban en su feudo.

Comenzó con muchas imprecisiones el cuadro ejidense, quizás porque le pasaba factura psicológica la presión de llegar a esta nueva cita ante su gente con la obligación de ganar después de haber perdido sus cuatro partidos anteriores como local. Para colmo, fuerte viento sobre un campo de Santo Domingo cuyo estado del césped dejaba mucho que desear. Su rival, un segundo equipo granadino que llegaba a tierras almerienses como el mejor filial del Grupo IV, no impuso mucha intensidad en el arranque del duelo pero supo aprovecharse de los errores en defensa de los locales para enseñar los dientes y tomar las riendas. En el 3’, un mal despeje de Gabri en su área hizo que el esférico llegara a las botas de Rubén Sánchez, que se precipitó y la mandó a las nubes. Dos minutos más tarde, el delantero foráneo tuvo el 0-1. Error de Emilio Cubo en una cesión muy comprometida a Aulestia, Rubén Sánchez llegó primero, regateó al meta, pero se escoró demasiado y su disparo dio en el palo. No empezaban bien las cosas para los de González.

El choque, al igual que el cielo que amenazaba lluvia, se iba a volver más gris, o al menos es lo que parecía en ese momento, para los celestes. Javilillo pidió el cambio a los siete minutos y González tuvo que hacer su primera sustitución. El capitán, que se unía a la casi interminable lista de lesionados del plantel del Poniente, dejó paso a Samu Corral, que regresaba precisamente después de unas semanas de baja por problemas físicos. Y como en cada uno de sus anteriores regresos, el de Alicún de Ortega iba a ser protagonista, aunque la primera gran ocasión de los almerienses fue en el 11’, en un mano a mano de Pino que acabó con el despeje de Lejárraga, que aguantó muy bien ante el ariete local. No fallaría, ya en el 19’, uno de los más queridos por Santo Domingo, que se puso la vitola de rescatador cuando peor lo estaba pasando su equipo. Balón muerto en el área del Recreativo Granada, cuya defensa parecía reclamar algo al colegiado, y llegó Corral para romper la pelota y hacer el 1-0.

Por primera vez en más de un mes, el CD El Ejido se ponía por delante en un duelo en casa y se creció. En el 27’ probó suerte el autor del gol con un disparo lejano, al igual que Carralero en el 34’. Éste último tuvo el 2-0, en un intento de vaselina desde dentro del área tras una buena asistencia de Pino, pero el balón se marchó fuera. La primera mitad acabó con muy buenas sensaciones para los celestes, que se marchaban al vestuario por delante en el marcador, mostrando menos errores que en jornadas anteriores pero con la lesión de Javilillo como nota más negativa del duelo hasta el momento.

Con más fuerza, crecidos por el marcador favorable, saltaron los ejidenses en una segunda parte en la que tuvo el 2-0 en el 51’ ante un filial nazarí que no daba la sensación de poner en muchos aprietos a los de casa. Contragolpe celeste, un dos para uno en el que Pino, ya en el corazón del área, se entretuvo demasiado cuando tenía a pocos metros, solo, a su compañero Carralero. El 9 del CD El Ejido perdió la pelota. Siguió buscando el tanto de la tranquilidad el equipo de González y lo encontró en el 58’, en un centro de Velasco que remató de cabeza Carralero, despejó Lejárraga y estuvo atento al rechace Molo para empujarla y estrenarse como goleador celeste. Los granadinos trataron de recortar distancias en la recta final, pero carecieron de mordiente ante una férrea línea defensiva de un CD El Ejido que supo administrar bien el tiempo que restaba, que rozó incluso el tercero y que, después de dos meses logró cambiar la dinámica en su feudo para hacer sonreír de nuevo a su gente.